El presidente del Tribunal Supremo (TS) y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, ha denunciado nuevamente la situación del CGPJ, que debía haberse renovado hace casi tres años, calificándola de "insostenible" e instando a las fuerza políticas a que dejen este asunto fuera de la "lucha partidista" y lleguen a un a acuerdo en "las próximas semanas".

"La situación en la que nos encontramos resulta insostenible para la judicatura y para la propia sociedad, porque este incumplimiento de la legalidad, postergando la renovación del Consejo, está afectando de manera directa a un órgano que fue diseñado por la propia Constitución para garantizar la independencia en el ejercicio de la función judicial", ha dicho durante la apertura del año judicial.

Por ello, ha subrayado que "urge" que el órgano de gobierno de los jueces "desaparezca del escenario de la lucha partidista y que las fuerzas políticas concernidas, con patriotismo constitucional y generosidad, alcancen en las próximas semanas el acuerdo necesario para la renovación".

Indultos a los presos del procés

El presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, ha criticado este lunes los argumentos que se dieron para defender los indultos a los condenados por el "procés" y ha recalcado que la Justicia no es ni ha sido nunca un "obstáculo para la paz" ni actúa por "revancha" o por "rencor".

Lesmes ha hecho esta defensa de la independencia judicial en su discurso durante el acto de apertura del Año Judicial, en el que ha lamentado que desde la política se cuestione la labor de la Justicia cuando sus decisiones "se contraponen a sus designios, dificultan sus estrategias o, simplemente, no son de su agrado".

El presidente del Consejo General del Poder Judicial ha hecho expresa mención a esa medida de gracia aplicada este verano a los condenados por el proceso de independencia de Catalunya y a los argumentos que se esgrimieron para justificarla desde el Ejecutivo, que contrapuso "la concordia frente al resentimiento".

"Como si la acción de la Justicia al aplicar la ley a la que todos nos debemos fuese un obstáculo para la convivencia u obedeciera a razones distintas de las previstas en las normas", ha advertido Lesmes, quien ha rebatido que esa visión no tiene nada que ver con la realidad.

Porque -ha dicho- los jueces actúan "con independencia absoluta de influencias externas o internas, políticas o de cualquier otra índole" y su acción "no se corresponde en modo alguno con la idea de revancha o con el sentimiento de rencor".

"Juzgar es dar a cada uno lo suyo de acuerdo con las leyes, leyes que han sido democráticamente aprobadas y que, por tanto, expresan la voluntad de la mayoría", ha afirmado antes de recordar que la Justicia "no es, ni ha sido nunca, un obstáculo para la paz, sino el instrumento fundamental para salvaguardar el orden jurídico y, por ende, la convivencia pacífica entre los ciudadanos".

Lesmes ha defendido en concreto el trabajo del Tribunal Supremo, autor de la sentencia de la causa de "procés", y "su defensa del orden constitucional y de nuestra democracia, garantizando la supremacía de las leyes y su cumplimiento".