A menos de una semana para que expire el plazo concedido por ERC a JxCat para pactar el nuevo Govern de la Generalitat, que se cumple este sábado 1 de mayo, ambas formaciones se han citado hoy martes en la cárcel de Lledoners (Barcelona) para celebrar una cumbre al más alto nivel con la finalidad de tratar de desencallar el acuerdo de gobierno. A la misma asistirá el candidato republicano a ser investido president, Pere Aragonés, que se reunirá con el secretario general de Junts, Jordi Sànchez, y en el orden del día aparece como punto destacado desencallar la estructura del nuevo Ejecutivo catalán.

En una rueda de prensa telemática realizada tras la reunión de la dirección de ERC, el dirigente republicano Sergi Sabrià confirmó ayer lunes que esta es "una semana clave" en las negociaciones, e insistió en que si el día 1 no se ha conseguido el pacto, ERC explorará "otras opciones" distintas a las de un gobierno de coalición con JxCat. Sobre la cumbre en Lledoners, explicó que su intención es que participe en la misma su principal líder, Oriol Junqueras, si bien esto "ahora mismo no se puede garantizar", admitió.

A juicio de Sabrià, la de hoy "será una reunión más entre las muchas que hay", si bien la especificidad de que se haga en Lledoners, que es la prisión donde se encuentran los presos independentistas, y "las expectativas sobre ella que pone Junts", pueden ser "una buena señal y nosotros iremos con voluntad de avanzar". "Todo lo que pueda servir para conseguir un acuerdo es positivo, y si se puede hablar de la estructura del Govern habremos dado un paso adelante", prosiguió, y concluyó: "La prioridad es que tengamos un gobierno de coalición, pero si Junts no está preparada habrá que explorar otras opciones".

Respecto a la otra parte en la mesa de negociación, la vicepresidenta de Junts, Elsa Artadi, criticó que ERC ponga ultimátums para lograr un acuerdo antes del 1 de mayo, algo que asegura que no se les ha trasladado en las reuniones que han mantenido hasta ahora. "Nos sorprende y vemos incomprensible el doble discurso que a veces hace ERC. Se pone un ultimátum, pero en privado no se nos ha trasladado nada de esto, ni ha salido el tema", señaló.

Sobre el contenido de las conversaciones en sí, Artadi describió un escenario con muchos apartados nucleares aún por resolver. Expresó su extrañeza por el hecho de que se pongan fechas límite cuando "aún no se ha convocado el grupo de trabajo sobre el ámbito económico ni se ha dado retorno del capítulo más institucional", entre otras cuestiones. "Hasta mañana no tendremos una explicación completa de cómo se prevé la estructura del Govern", añadió, en referencia a la reunión de hoy en Lledoners.

Dicha cumbre fue duramente criticada por Vox, Ciudadanos y el PPC. Ignacio Garriga (Vox) la calificó de "lamentable" y arremetió contra "la mafia" independentista, Nacho Martín Blanco (C's) habló de reunión "delirante y surrealista" y Lorena Roldán (PPC) aseguró que es una "irresponsabilidad".

"La prioridad es una coalición pero si Junts no está preparada habrá que explorar otras opciones"

Portavoz de ERC