Una cosa es la crítica y otra la lealtad. Así, pese al tono -en algún momento crítico- que empleó Iñigo Urkullu el pasado domingo en la videoconferencia de Pedro Sánchez con los presidentes autonómicos, el lehendakari seguirá actuando con la “máxima lealtad” con el Gobierno español respecto a la gestión de la pandemia de coronavirus, por lo que está dispuesto a apoyar una nueva prórroga del estado de alarma, en el caso de que así se requiera, y a participar, desde el “respeto y reconocimiento mutuo”, en pactos de Estado que permitan afrontar la recuperación económica.

Así lo aseguró ayer el portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, en su comparecencia tras el Consejo de Gobierno del Ejecutivo de Gasteiz. Erkoreka afirmó que el “tono crítico” que el lehendakari mantuvo con Pedro Sánchez “no estuvo por encima” del que emplearon otros presidentes, “algunos de ellos del propio PSOE”. Señaló, además, que fue una reunión de presidentes, no de gobiernos, y que en el caso de comunidades con ejecutivos de coalición “seguro que los socios no coinciden al 100%” con la postura mantenida por sus respectivos líderes.

Lo más probable, admitió ayer Erkoreka, es que tampoco en el Gobierno vasco todos los consejeros respalden por completo las palabras del lehendakari, porque en los pactos de coalición “se comparte un programa pero no planteamientos políticos”. Según señaló, las discrepancias que puedan surgir se tratan en el Consejo de Gobierno, en el que sí hay un planteamiento unánime: “la voluntad de seguir trabajando conjuntamente con el Gobierno central con la máxima colaboración e implicación para plantar cara a la propagación del virus” que es “una batalla que concierne a todos”.

Asimismo, más allá de las “coincidencias o desacuerdos” entre ambas formaciones, Erkoreka puso en valor la “voluntad de colaboración” del PNV y el PSE para seguir trabajando y colaborando, también con el Gobierno español y el resto de agentes e instituciones en lucha contra el coronavirus.

En todo caso, el portavoz del Ejecutivo vasco consideró que a la hora de prorrogar de nuevo el estado de alarma, el Gobierno español debería buscar un mayor “consenso” e incluir alguna medidas de “relajación” de las restricciones actuales, como la posibilidad de que los niños puedan salir acompañados a la calle o de que se permitan ciertas actividades deportivas en el exterior. En este sentido, recordó que el Gobierno vasco ya trabaja con el Ejecutivo Sánchez en el diseño de un plan de “desescalada” y de “vuelta a la normalidad” tras el confinamiento.

En la misma comparecencia, la consejera de Trabajo y Justicia, la socialista María Jesús San José, también fue interpelada por las diferencias en el seno del Ejecutivo y aseguró que comparte con la dirección de su partido que algunas críticas de “trazo grueso no ayudan a conservar la confianza de la población que está dando muestras de un elevado nivel de responsabilidad”. San José reconoció que la gestión de la crisis es un “desafío” para los dos gobiernos -español y vasco- y dio por descontada la voluntad de colaboración de todas las instituciones . “Lo que de verdad importa es la voluntad de anteponer una actuación eficaz y eficiente ante la crisis”, zanjó.

En este contexto, ayer tuvo lugar, de manera telemática, la reunión de la Comisión Ejecutiva del PSE en la que se había adelantado que su secretaria general, Idoia Mendia, iba a hacer un llamamiento a algunos miembros del Gobierno vasco para que “rebajen el tono de las críticas no justificadas a la actuación del Gobierno de España”. Lo cierto es que la líder de los socialistas vascos instó a sus representantes en las instituciones - algunos presentes en la cita, como los consejeros Iñaki Arriola, Sonia Pérez y María Jesús San José; el delegado del Gobierno español en la CAV, Denis Itxaso; o el portavoz parlamentario, José Antonio Pastor- y a los secretarios generales del PSE en los tres territorios, a “redoblar los esfuerzos por dar una respuesta adecuada a una situación muy grave”.

Mendia instó a los responsables del partido a “no bajar la guardia en ningún momento” ante situaciones que “requieran una respuesta ágil y a diseñar soluciones para afrontar el futuro próximo con garantías de éxito”. “La gente confía en nosotros en momentos difíciles porque saben que vamos a responder con una defensa a ultranza de los servicios públicos, de una sanidad de calidad, en defensa de la igualdad y de la justicia social”, dijo la líder del PSE, para quien la ciudadanía “no perdonará a quienes se empeñan en poner palos en las ruedas, ni a quienes hacen cuentas sobre la rentabilidad política y su interés particular y levanten muros con críticas injustas”.

“El tono del lehendakari no estuvo por encima del de otros presidentes, algunos del PSOE”

Portavoz del Gobierno vasco

“La ciudadanía no perdonará a quienes levanten muros con críticas injustas”

Secretaria general del PSE