Los ministros de Exteriores del G7 (Estados Unidos, Alemania, Francia, Reino Unido, Canadá y Japón), así como la Unión Europea, han exhibido este domingo una respuesta conjunta contra una posible invasión rusa de Ucrania, que comportaría "enormes consecuencias" para Moscú.

El comunicado de este domingo tiene lugar tras el encuentro celebrado en la localidad británica de Liverpool, donde todos sus participantes se han declarado "unidos en la condena de la acumulación militar de Rusia" en la frontera de Ucrania "y su retórica agresiva", hacia Kiev.

"Hacemos un llamamiento a Rusia para que reduzca la tensión, busque canales diplomáticos y cumpla con sus compromisos internacionales sobre la transparencia de las actividades militares", reza la nota.

El texto incide además en que cualquier uso de la fuerza para mover fronteras "está estrictamente prohibido por el derecho Internacional". "Rusia no debe tener duda alguna de que una mayor agresión militar contra Ucrania tendría consecuencias enormes y un grave coste", según la nota.

"Reafirmamos nuestro compromiso inquebrantable con la soberanía y la integridad territorial de Ucrania, así como el derecho de cualquier estado soberano a determinar su propio futuro. Encomiamos la actitud moderada de Ucrania e intensificaremos nuestra cooperación en nuestra respuesta común e integral", concluye el comunicado.

Este mismo domingo, el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha lamentado que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se haya creído la posibilidad de una supuesta "invasión" de Rusia en Ucrania cuando en realidad no es más que un "bulo informativo".

"Biden ha llegado a hablar de una invasión efímera de Ucrania, pues, al parecer, los propios estadounidenses ya creen que eso no es un bulo informativo, sino la pura verdad", ha lamentado Peskov en una entrevista brindada al canal televisivo Rossiya 1.

Estados Unidos lanzó la voz de alerta tras constatar un incremento de las fuerzas rusas en la frontera con Ucrania, a lo que Peskov ha respondido que "esas tropas no amenazan a nadie" y se encuentran en territorio ruso mientras recordó que Washington tiene desplegados a militares "a 1.000 kilómetros de nuestro territorio", según hizo saber en la entrevista, recogida por la agencia oficial de noticias rusa Sputnik.