Bilbao. La Ertzaintza continúa con la investigación abierta para detener al presunto agresor de una pareja durante la madrugada de este sábado en Bakio a la que atacó con un cuchillo cuando ambos regresaban a sus casas.

Según ha informado el Departamento vasco de Interior, todavía no se han producido detenciones, aunque en las últimas horas la Policía vasca ha procedido a tomar declaración a un individuo en calidad de testigo.

AGRESIÓN EN FIESTAS

Los dos jóvenes agredidos, B. M. y M. F., dos bilbainos veraneantes en Bakio, fueron atacados con arma blanca cuando, hacia las 4.30 horas, bajaban de las fiestas de Eneperi, un suceso que ha mantenido al pueblo en vilo durante 19 horas.

B. M y M. F., la pareja agredida, acudieron esa noche a Bakio para participar en la celebración que cada año realiza el restaurante Eneperi dentro de las fiestas de San Joan Doloz. En torno a la hora citada, la pareja se alejó del bullicio y caminó por una vía secundaria cercana. Mientras avanzaba por la carretera que une los municipios de Bermeo y Bakio, a la altura de la depuradora de aguas en el barrio San Pelayo, fue atacada. Sin una causa aparente, un joven se abalanzó sobre ellos y les apuñaló por la espalda causándoles heridas de diversa consideración. B. M. fue apuñalado en el hombro, mientras que su pareja recibió varias cuchilladas, la más grave cerca del corazón. Tras la agresión, el asaltante se dio a la fuga dejando a la joven herida de gravedad y a su novio con heridas más leves. Como consecuencia de las puñaladas, la chica tuvo que ser operada de urgencia en el hospital de Cruces. Por su parte, B. M. fue trasladado a Basurto y, además de las heridas, sufrió los efectos de un shock por la dura experiencia vivida. Ahora, la Policía vasca se encuentra centrada en la investigación de los hechos para saber exactamente lo que ocurrió.

El suceso irrumpe en una localidad que se encuentra en plenas fiestas patronales y que ayer tuvo que plantarse el pañuelo de cuadros entre la tristeza y la desazón. Desde el Ayuntamiento manifestaron que su principal preocupación, lo más importante, era que los jóvenes se recuperaran cuanto antes y que se hallara pronto al agresor.

los hechos B. M. y M. F. bajaban de la zona festiva, y según fuentes cercanas a la investigación, el agresor les pidió un cigarro. Al parecer, estos se lo negaron y continuaron su camino. Fue entonces cuando, según las mismas fuentes, les atacó por detrás apuñalando a la chica en la espalda e hiriendo en el hombro al joven. Fuentes consultadas por DEIA afirman que la pareja echó a correr huyendo, aunque ella, debido a sus heridas, se desplomó antes de llegar a una zona donde había más gente y donde pidieron ayuda.

Testigos de los hechos explicaron cómo momentos antes del ataque el agresor merodeaba por los alrededores con un ciclomotor, que subió a la zona de Eneperi, donde se concentraba la fiesta, y que aparentemente se encontraba en estado de embriaguez. "Se le veía que estaba mal porque se cayó varias veces", afirmaron testigos que añadieron que incluso llegó a meterse con gente presente en el área de festejos. "Nos extrañó mucho su reacción, cuando bajaba se cayó con la moto y en lugar de dejarse ayudar se puso violento y se marchó", añaden. Al parecer, ayer se encontró un ciclomotor que podría tratarse del que llevaba el atacante. Fue ese comportamiento el que puso en alerta a jóvenes bakiotarras, que iniciaron su propia investigación. Por la mañana dieron con un presunto sospechoso que respondía a las características y que tenía una herida en el hombro -al parecer provocada por la caída-. Así pues, decidieron seguirle hasta su casa, sita en el número 15 de Basigoko Bidenagusia, donde al parecer llevaba un año viviendo de alquiler. Ayer eran muchos los bakiotarras que aseguraban no conocer al presunto agresor, aunque fuentes consultadas afirman que hace un tiempo estuvo trabajando como pintor en el Kiroleta, el club de tenis de Bakio.

A falta de que se esclarezcan los hechos, M. F. fue trasladada al hospital de Cruces donde fue operada de urgencia, intervención en la que sufrió una parada cardiaca de unos quince segundos y tras la que permaneció grave pero con una evolución favorable. Por su parte, B. M. fue trasladado al hospital de Basurto con heridas más leves y bajo los efectos de un shock por la experiencia vivida.

"Desasosiego" "¿Cómo es posible que una cosa así suceda en Bakio?". Esa era la pregunta que ayer se planteaban los vecinos de esta localidad costera poco habituada a este tipo de incidentes. "Desasosiego". Ese es el término con el que una bakiotarra definió el estado anímico general del pueblo, cuyos actos festivos quedaron en segundo plano para lamentarse del suceso. En las cafeterías y tiendas de localidad se hablaba del tema y se hacían conjeturas sobre lo sucedido, entre la estupefacción y la sorpresa. "Este siempre ha sido un pueblo seguro y tranquilo", aseguraban perplejos.

El Ayuntamiento de Bakio también dejó evidencia de su consternación ante los hechos, y las dos fuerzas políticas con representación en el Consistorio, PNV y Bildu, emitieron un comunicado conjunto en el que manifestaban su "más enérgica repulsa y condena" ante esta agresión y trasladaban "su apoyo y solidaridad" a los allegados de los dos jóvenes. Este Ayuntamieto valoró la posibilidad de suspender las fiestas pero decidió seguir adelante con el programa que ayer estaba dedicado a los niños para tratar de dotar de normalidad a un pueblo inevitablemente consternado.

Redes sociales "¡Último día grande del veranooo!!!!, a ver qué tal acabamos, #eneperi", lanzaba el joven B. M. el pasado viernes a través de su cuenta de Twitter. Se trataba de un mensaje cargado de ilusión; un optimismo que poco tiene que ver con el triste fin de fiesta que le esperaba. La preocupación entre los allegados y conocidos de los dos jóvenes agredidos también se evidenció en las redes sociales. Ayer eran muchos los seguidores de sus cuentas los que dejaban mensajes de ánimo y cariño. "Aupa pareja, mucho ánimo que esto en unos días solo será un mal susto", rezaba uno de los muchos mensajes que ayer recibió el dúo.