NFLAMADO patriota español: No pude evitar sonreír al verlo jurar bandera (la rojigualda, por supuesto) en un acto celebrado el pasado domingo en el cuartel del regimiento Garellano en Mungia. De entrada, me resulta curioso que para manifestar apego oficial a la enseña sea necesario hacerlo en unas instalaciones militares y ante unos tipos uniformados. Pero la sonrisa no era por eso sino porque hasta donde yo sé, y creo que de la fuente más directa posible, usted tuvo la oportunidad de haber jurado bandera como recluta de reemplazo hace más de 30 años. Por alguna razón, sin embargo, encontró el modo de librarse del servicio militar. Ante mi mirada socarrona, me explicó que usted no necesitaba que le enseñaran a amar a España. Curioso.
- Multimedia
- Servicios
- Participación
