PERSEGUIDO por un pasado turbulento, Max Rockatansky (Tom Hardy), un ex policía de la carretera, cree que la mejor manera de sobrevivir es seguir su camino en solitario. Pero su plan dura poco, ya que se cruza en su vida la emperatriz Furiosa (Charlize Theron), una mujer que trata de cruzar un inmenso desierto en compañía de cinco mujeres más, conocidas como las cinco novias, que huyen del tirano Inmortan Joe (Hugh Keays-Byrne) y de su sanguinarion séquito. El grupo de mujeres deposita en Max, él único capaz de sortear los peligros del desierto, la esperanza de salvarse. Pero la historia se vuelve del revés cuando Inmortan Joe captura a Max y son ellas, con Furiosa a la cabeza, quienes se convierten en su única posibilidad de escapar.

Mad Max: Fury Road está dirigida, producida y coescrita por George Miller y es la cuarta de la franquicia Mad Max. El director australiano también firmó las tres películas anteriores: Mad Max: Más allá de la Cúpula del Trueno (1985), Mad Max 2: El guerrero de la carretera (1981) y Mad Max: Salvajes de autopista (1979). Estas tres historias forman parte del imaginario colectivo de todos los cinéfilos que disfrutaron del cine épico de los años 80, quienes esperan con impaciencia la llegada de este nueva entrega para comprobar cómo sientan a su héroe los enormes adelantos técnicos llegados al cine en las últimas décadas.

Cine australiano El primer título de la saga, Mad Max: Más allá de la Cúpula del Trueno, una película independiente australiana de bajo presupuesto y dificultades de distribución, se convirtió de forma inesperada en un fenómeno mundial, catapultando al éxito a un actor desconocido, Mel Gibson, y a su osado director, George Miller, ambos australianos, que explotarían el filón en dos ocasiones más ya sin cortapisas presupuestarias. La película presentaba a un héroe trágico en un mundo futurista y posapocalíptico en el que libran una batalla sin cuartel una banda de motoristas salvajes y un grupo de policías. A Max, también policía, le mueve un único objetivo, vengar a su familia, blanco de la banda asesina. Al volante de un Ford Falcon, se enfrenta a sus enemigos en las solitarias y fantasmagóricas autopistas australianas.

En Mad Max 2: El guerrero de la carretera, nuestro héroe continúa en su lucha contra los guerreros salvajes, esta vez junto a los integrantes de un campamento y defendiendo un aprovisamiento de combustible.

Y en Mad-Max: Más allá de la Cúpula del Trueno, le toca defender a una tribu de niños perdidos que luchan por sobrevivir. En esta tercera entrega, participó Tina Turner.