El exministro de Transportes José Luis Ábalos ha defendido este miércoles que "no hay nada delictivo" en la remuneración que recibió del Congreso durante sus diez años como diputado socialista y ha asegurado que lo "ilícito" es "la filtración a los medios" de la respuesta de la Cámara Baja, que incluye datos personales, antes de que llegara al Tribunal Supremo.

Lo ha afirmado en su cuenta en X después de que el Congreso haya remitido al Supremo, sin certificar la titularidad bancaria de los ingresos de Ábalos, las retribuciones abonadas entre 2014 y 2024 (más de 750.000 euros) tras detectar la Guardia Civil la semana pasada incoherencias entre lo declarado a Hacienda por la Cámara Baja y lo que consta en las cuentas del diputado.

La Guardia Civil reflejó en un informe la diferencia entre los 751.421,57 euros imputados por la Agencia Tributaria a Ábalos por el Congreso en esa década y los 79.841,74 euros que los agentes hallaron en sus cuentas de retribuciones procedentes de la Cámara Baja.

"Todo está en orden y declarado a Hacienda, como no podía ser de otra manera"

"Efectivamente, no hay nada delictivo en lo cobrado en 10 años por las rentas de mi trabajo. Todo está en orden y declarado a Hacienda, como no podía ser de otra manera", ha escrito Ábalos, que ha lamentado se hayan filtrado a los medios cuestiones como justificantes de gastos de manutención en viajes oficiales o datos de kilometraje por los desplazamientos.

Sin embargo, en el oficio del Congreso enviado al Supremo, el secretario general del Congreso, Fernando Galindo, ha informado de que "el abono de las retribuciones y otros pagos" a los diputados "no se condiciona a la presentación de un certificado acreditativo de la titularidad de la cuenta bancaria, por lo que no se dispone del referido dato".

Según Ábalos, lo llamativo es que "la investigación -caso Koldo- genere tantas sospechas, tanto oficio policial y tanto mandamiento para terminar llegando al mismo punto de partida y comprobar al final que lo declarado a Hacienda era lo cierto".