Bilbao. En un mundo acelerado es de agradecer la presencia de alguien que pare. Es lo que hizo Begoña Sánchez-Sauthier, Bigunki para el espacio virtual de las redes sociales. Su mundo profesional es la informática así que resulta sorprendente que se haya dedicado al ganchillo -hagan el ejercicio mental de buscar dos mundos más contrapuestos que esos...- con éxito. Tanto que acaba de publicar dos libros, Abecedario en 3D con bigunki. Patrones de ganchillo y Ganchillo con bigunki. Patrones de Amigurumi.
¿Perdón?
¿Qué no entiende?
Amigurumi
¡Ah, bueno! Es una palabra que viene del japonés. Significa "muñeco relleno" y es la técnica creada parahacer relieve con el ganchillo.
Tuvo que recurrir a Japón para ello...
Bueno, es el lugar donde se ha recuperado una tradición que se estaba perdiendo.
Me va a perdonar, pero viniendo del planeta internet cuesta entender que se detenga aquí...
Precisamente por eso. Vamos todo el día a mil por hora y me propuse parar y estar un rato tranquila, serena. La vida va demasiado rápida y hay que buscar fórmulas para frenarla
Pero ponerse, a una edad, a aprender algo tan complejo...
No es tan difícil. Yo aprendí en 2008 con un libro. Lo bueno de los manuales es que te lo explican todo al dedillo. Uno, dos; uno, dos... ¿ve?
No, no veo. El trabajo manual me parece que cada día tiene más dificultad porque se están perdiendo destrezas...
Yo doy clases a niños pequeños y pongo siempre el mismo requisito. Para comenzar con el ganchillo tienen que saber escribir. Los movimientos son semejantes y hay que tener un mínimo de habilidad.
Bien, pero yo le hablaba de lo que puede llenar algo hecho con tus propias manos
A mí me llena la belleza. Si creo que lo que he hecho es bonito me quedo satisfecha.
¿Aunque solo sirva de adorno?
Eso es. Lo que yo hago no tiene ninguna utilidad. Puede decirse que soy una viciosa.
¡Cómo dice!
En el buen sentido del término. Lo hago porque me gusta, sin ninguna otra motivación.
¿Nisiquiera esos trajecitos de perlé para los niños que tanta fama ganaron en Bilbao?
Nisiquiera. Lo que sí he hecho el recuperar de la tradición oral el patrón del babero al estilo bilbaino.
¿Cómo es? ¿Tamaño XXL?
Ja, ja, ja. Es muy bonito. Decidí documentarme y dibujar los patrones que colgué en internet.
¿En japonés?
Ja, ja, ja. No. En castellano. Pero desde una comunidad de tejedoras me pidieron de inmediato que lo tradujese al inglés. Ha despertado mucho interés.
"Comunidad de tejedoras" ha dicho. ¿Tenemos los hombres mala mano para las agujas?
Doy clases de ganchillo desde hace un tiempo y solo he tenido un alumno adulto.
¿Adulto, dice?
Sí. Es curioso, pero cuando trabajas con niños no tienen tantos complejos y prejuicios. Yo creo que no es una cuestión de más o menos habilidad de un sexo que otro sino de educación. Y los niños todavía no están acomplejados.
Parten de cero
No crea. Muchas veces me comentan que en las ikastolas les están enseñando ganchillo. Me parece fabuloso.
¿Se puede vivir del ganchillo?
No, rotundamente no.
Nisiquiera de los hijos de las amigas...
Los hijos de las amigas van creciendo, ja, ja, ja. Y no son tantos.
¿Qué grado de concentración requiere un trabajo delicado como el suyo?
A la hora de aprender la técnica y dibujar el patrón hay que fijarse. Pero una vez que empiezas, con un ojo miras al muñeco y con el otro la tele.