El sector del automóvil muestra su compromiso con la movilidad sostenible, solicita apoyos para la avanzar en la descarbonización y clama contra el probable aumento de carga impositiva por la aplicación del método de medición de emisiones WLPT, que afecta a más de la mitad de los modelos hoy exentos de la tasa de matriculación.
El gremio del automóvil es un coro heterogéneo que, pese a algunas vocaciones de solista, suena hoy con una armonía inusitada. Ha quedado patente en la VI Jornada Deia del Automóvil, celebrada este miércoles en formato virtual, con la participación de cinco directivos de primer nivel: Manuel Terroba, presidente de BMW Group en la península; Marta Blázquez, vicepresidenta ejecutiva de la asociación de concesionarios Faconauto; Fidel Jiménez de Parga, director general de Škoda; Alberto de Aza, CEO de Fiat Chrysler Automobiles en España y Portugal; y Eduardo Divar, director general de Kia Motors Iberia.
Todos han coincidido en la necesidad de sentar las bases que consoliden el sector, esencial para la economía estatal puesto que aporta casi el 10% del PIB y genera dos millones de puestos de trabajo. Para ello reclaman a las administraciones públicas más ayudas y menos impuestos.
LA JORNADA DE DEBATE EN STREAMING:
MOVILIDAD SOSTENIBLE
Fabricantes y distribuidores, y con ellos los proveedores de equipos y servicios, muestran un compromiso firme con la sociedad y se conjuran para seguir ofreciendo el mejor de los servicios posibles. Y una buena forma de hacerlo es perseverar en la búsqueda de la movilidad sostenible, trabajando en la descarbonización y esforzándose por democratizar la electrificación.
Por eso, lamentan de manera unánime la más que probable subida de impuestos derivada de la implantación del protocolo WLTP para medir las emisiones de dióxido de carbono de los tubos de escape.
Este método, en vigor desde el primer día de 2021, calcula con mayor rigor y realismo las emanaciones de CO2 de los vehículos, registro en función del cual se determina el Impuesto de Matriculación a pagar. Ese plus de precisión comporta que el nivel oficial de emisiones ascienda en todos los casos. No es que ahora el coche contamine más, sino que sus secuelas se detectan mejor. En consecuencia, muchos modelos dejarán de estar exentos de la tasa o pasarán a pagar un tipo superior. Se verán afectados entre el 40 y el 70% de los automóviles a la venta.
Los ponentes de la VI Jornada Deia del Automóvil se han hecho eco del sentir del sector, que demanda una mayor tolerancia de la administración con los límites de emisiones de CO2. Es algo que ya han hecho Francia y Portugal. Así, dicen los expertos, se evitaría una subida media del precio de los coches de hasta mil euros, además de un frenazo a las ventas estimado en cerca de cien mil unidades.
SUPRESIÓN DEL IVA EN COCHES ELÉCTRICOS
Los directivos reunidos por Deia coinciden en la idoneidad de la supresión del IVA en los coches eléctricos para fomentar su difusión. Asimismo, ven necesario seguir articulando planes de renovación que retiren de la circulación los vehículos obsoletos, que además de inseguros son altamente contaminantes.
Terroba, Blázquez, Aza, Jiménez y Divar anhelan liberarse de la incertidumbre inherente a la actividad del sector. Coinciden en encarar el futuro con moderada esperanza, pero con máxima ilusión.
La pandemia ha acelerado los procesos de digitalización y ha hecho que la tecnología se vuelque al servicio de una clientela con necesidades cada día más diversas.
Estiman que el mercado se recuperará ligeramente en 2021, si bien no se ponen de acuerdo en el volumen final de matriculaciones. Los más optimistas consideran posible acercarse al millón de unidades.
