Autoridades del metro de Nueva York descubrieron un cuarto de almacenamiento convertido en una “sala de entretenimiento no autorizada” secreta debajo de las plataformas de la icónica terminal Grand Central de Manhattan, la cual fue acondicionada para “pasar el rato, emborracharse y festejar”, recoge la CBS.

Durante las investigaciones, los oficiales hallaron dentro de la sala un aire acondicionado, equipo de entrenamiento, muebles, así como un microondas, un televisor, e incluso una nevera con una cerveza abierta en su interior. Además, el lugar contaba con armarios, especialmente diseñados, para ocultar el equipo. “Muchos neoyorquinos han fantaseado con relajarse con una cerveza fría en un lugar de primera clase de Manhattan”, comentó la inspectora general de la Autoridad Metropolitana de Transporte, Carolyn Pokorny. “Pero pocos tendrían el descaro de requisar una habitación secreta bajo la Grand Central y convertirla en su propia cueva […] mantenida a expensas de nuestros pasajeros”, agregó. El hallazgo fue posible gracias a una denuncia anónima recibida por las autoridades en febrero. Hasta el momento, las indagatorias han señalado a 3 empleados como responsables, quienes aseguran que nunca usaron la sala.