GUADALAJARA. La línea de ropa y accesorios toma el sobrenombre del capo y el número 701 -el lugar que la revista Forbes le dio en la lista de los hombres más ricos del mundo- y fue diseñada por la hija del capo, Alejandrina Guzmán.

Las prendas cuestan desde los 701 pesos (unos 33 euros) a los 15 000 pesos (alrededor de 700 euros), y han tenido muy buena acogida en Intermoda horas antes de que se dicte sentencia contra el narcotraficante en una corte de Nueva York.

El portavoz, Gilberto de Anda, ha dicho este miércoles a Efe que la marca tiene 13 años de antigüedad, pero es la primera ocasión que los 19 diseños que conforman la primera colección son mostrados en un espacio para venta al público.

Ha explicado que la hija del Chapo es quien tuvo la idea de explotar la imagen de su padre en moda y vendió los derechos a una empresa de Guadalajara para que se encargara de la distribución de la ropa en tiendas.

Ha admitiido que la gente se ha interesado por "morbo". "También despierta (el morbo) obviamente, y también el morbo vende, pero nosotros no nos estamos colgando, no nos interesa", ha agregado.

Decenas de curiosos se han acercado al espacio que la marca tiene en la sede de Intermoda. Algunos miraban con incredulidad, otros incluso han comprado algún accesorio.

El rostro del líder del Cártel de Sinaloa preso aparece en las paredes del estand, en las prendas y hasta en las cajas donde se guarda la ropa.

Su historia es brevemente contada en las etiquetas que acompañan a cada pieza donde, obviando pasajes de su historia, el criminal es descrito como "un humilde vendedor de naranjas" y "un líder dispuesto y atento"

.La colección comprende chaquetas, camisas y americanas para hombre y blusas.

Todas llevan un logotipo con las iniciales del narcotraficante más famoso del mundo, otras su rostro, algunas imágenes de calaveras o del símbolo de los pesos mexicanos y otras, la leyenda "Lord of the mountains" ("Señor de las montañas"), como es conocido en su natal estado de Sinaloa.

Además de ropa, la marca comercializa accesorios como cinturones, carteras, pulseras y licoreras que, según la publicidad, son elaborados por reclusos del penal de Puente Grande, el mismo del que el Chapo escapó en 2001."La idea fundamental es recabar fondos para una asociación civil que se está formando y que lo que se comercializa, todo el lucro que se obtenga de ello, vaya a un fondo que está en Puente Grande. Se les está dando dinero a las personas, se les está ayudando para que los que cayeron en la desgracia de las drogas se beneficien", ha asegurado el portavoz.