uNA visita conjunta al castillo de Muñatones y la ferrería de El Pobal, ambos ejemplos del mejor patrimonio arquitectónico vizcaino, permite completar el conocimiento de cómo vivían los antiguos nobles vascos, así como sus fuentes de riqueza. Durante el verano siguen abiertos ambos, con visitas guiadas el fin de semana y hasta la participación de actores este mismo domingo en el caso del castillo.

El Castillo de Muñatones, ubicado en Muskiz, es el resultado de un largo proceso de construcción que se prolongó durante los siglos XIV y XV, en el contexto de las Guerras de Bandos que asolaron Bizkaia. Se trata de uno de los elementos más sobresalientes del patrimonio arquitectónico vizcaino, por lo que fue declarado Conjunto Monumental, reconociendo su excepcional valor histórico y la calidad de los restos conservados.

Desde la Diputación de Bizkaia destacan que Muñatones es “la única torre de Bizkaia que merece la calificación de castillo, por su sistema de murallas exteriores”. Además, está ligada a uno de los personajes más singulares de nuestra historia, el poderoso Lope García de Salazar, hombre de armas y letras, quien escribió las conocidas Bienandanzas e Fortunas.

Como suele ser habitual en los últimos años, todos los domingos de verano se organizan visitas guiadas y pasado mañana, el día 14, además, unos actores darán vida a los personajes que vivieron aquellas Guerras de Bandos. Concretamente Bego Gómez y Joaquín Ponte, miembros del grupo Alabazan, darán vida a los personajes que vivieron en el castillo de Muñatones, para acercar a los vizcainos, de una forma amena, aquellos viejos enfrentamientos.

El historiador Juan Manuel González Cembellín conducirá este relato teatralizado, que comenzará a las doce del mediodía. La entrada general costará cuatro euros y la reducida, tres. Allí se podrá escuchar al mismísimo Lope García de Salazar, el banderizo más poderoso de la comarca y cronista de Bizkaia, y a tres damas que jugaron un papel decisivo en la historia de su linaje, aportando una versión personal de la época.

la ferrería Además de estas visitas dominicales a Muñatones, que se realizan a las 10.30 y 12.30 horas, en euskera y castellano, al precio de 3,5 euros, desde Diputación se ofrece también una visita conjunta a la ferrería El Pobal, cuya relación es más que obvia, ya que Ochoa de Salazar, nieto de Lope García, la construyó a comienzos del siglo XVI y sus descendientes mantuvieron la propiedad del negocio durante cerca de 200 años.

Cerrada en 1965 y reconvertida en museo tradicional, contar con El Pobal es un privilegio en el siglo XXI, ya que en Bizkaia han desaparecido con el tiempo prácticamente todas estas instalaciones. Modelo de ferrería hidráulica que se generalizó entre los siglos XIII y XIV, se trabajaba en ella (se comprueba cómo en las visitas) el mineral de hierro para convertirlo en metal y elaborar todo tipo de herramientas (rejas de arado, tornillos, martillos, azadas, picachones...) para los baserris de la zona, así como útiles de uso doméstico y para la navegación.