La Comunidad Valenciana es conocida además de por sus playas, por su gastronomía y por su impresionante y diverso patrimonio cultural como las Fallas, la Ciudad de las Artes y las Ciencias en Valencia o la ciudad de Peñíscola, entre otros muchos monumentos y celebraciones de interés turístico y cultural. Asimismo, cuenta con singulares y magníficas edificaciones originarias de los pueblos predecesores que vivieron en el territorio que ahora conforma esta Comunidad Autónoma.
Conocido por ser uno de los lugares más bonitos de toda España, el peculiar pueblo de Guadalest se encuentra en la provincia de Alicante, a escasos 20 kilómetros de Benidorm. Sin duda alguna, el elemento que hace más especial a este pequeño municipio es el castillo que tiene incrustado en la cima de una gran roca que corona el poblado denominado Castell de Guadalest.
Esta edificación fue construida durante el siglo XIII cuando la provincia se encontraba bajo dominio musulmán. Desde entonces, la construcción ha sufrido modificaciones y reconstrucciones debido a un terremoto que afectó el suelo en 1644 y a una explosión durante la Guerra de Sucesión en 1708.
Otra de las facetas que caracteriza a este pueblo es su división y diferenciación en dos barrios. El primero de ellos, el Barrio del Castillo, el más cercano a la edificación que lleva su nombre y que también está construido en la propia roca. El segundo barrio es conocido como el Arrabal, que se edificó cuando el pueblo experimientó un crecimiento importante de población, por lo que está situado en la falda de la montaña.
La mayor parte de los habitantes de este pueblo vive gracias al sector servicios por la gran afluencia turística que existe en la zona, y es que en en 1974 el Castillo de Guadalest fue declarado conjunto histórico – artístico. Más allá de la dedicación al sector servicios también se conservan profesiones como la marroquinería, fabricación de artículos de cuero, y una pequeña parte del pueblo se dedica a las tareas agrícolas como el cultivo del olivo, algarrobo o almendro.
El poblado cuenta con varios hoteles y casas rurales en los que hospedarse. Asimismo, para los amantes de la gastronomía hay más de 20 opciones a elegir para poder degustar una gran variedad de platos. Para poder adquirir recuerdos, productos típicos y artesanía, el pueblo cuenta con en torno a 40 comercios.
Para poder llegar a Castell de Guadalest se puede viajar desde Benidorm en la línea 16 del transporte público. Para llegar desde la ciudad desde la ciudad de Alicante, se debe coger un autobús hasta la ciudad de Benidorm y una vez allí viajar en la línea 16.
Todo turista que visite Guadalest y la provincia de Alicante, no se debe ir sin visitar otros pueblos impresionantes como Altea, Alcoy, Calpe o Denia.
