londres. Considerada la mejor televisión del mundo, la BBC cumple 75 años de su primera emisión regular con el prestigio intacto y retos importantes como una reducción de su presupuesto y la necesidad de adaptarse a la era de internet.
A las tres de la tarde del 2 de noviembre de 1936, la BBC hizo historia convirtiéndose en la primera cadena del planeta que ofrecía una programación diaria. La emisión inaugural, que fue vista por tan solo 400 personas, consistió en una ceremonia muy poco televisiva que incluía un concierto de la orquesta de la cadena y varios discursos, pero en ese momento empezaba de manera pionera toda una aventura, la televisión tal y como la conocemos.
Desde entonces, a excepción de un parón durante la II Guerra Mundial, la BBC ha llegado ininterrumpidamente a los hogares británicos mezclando información y entretenimiento, pero manteniendo siempre la mejor calidad, algo que ha contagiado al resto de los canales del país y que ha marcado una forma muy especial de hacer televisión.
La BBC hoy no tiene nada que ver con la que inició de manera experimental sus emisiones hace 75 años. Unos 25.000 empleados trabajan en sus dos canales generalistas y en otros seis que se pueden ver de manera digital vía TDT. A nivel internacional, la cadena pública cuenta con BBC World News, un prestigioso canal de 24 horas de noticias que no se puede ver en el Reino Unido.
Ahora la BBC, tanto la televisión como la radio, afronta uno de sus momentos más duros, después de que el Gobierno decidiese congelar durante los próximos seis años la tasa que pagan los británicos, por lo que la corporación anunció recortes de un 20 por ciento de su presupuesto. Esto va suponer el despido de 2.000 empleados, menos producciones nuevas y más repeticiones.
En medio de esta turbulenta situación, la BBC mira al futuro con su gran apuesta: la televisión a demanda. El proyecto se lanzará el año que viene. Se trata de un sistema por el que adaptará su impecable televisión por internet a las pantallas del televisor.