Apostar por la madera de Euskadi es apostar por la riqueza y el empleo. El tejido empresarial vasco de la madera está dominado por la pequeña empresa, casi el 95% de las empresas tiene menos de 20 empleados, y el 4,8% es mediana empresa. Estos datos muestran que la silvicultura supone, para muchos baserritarras, ingresos complementarios para explotaciones agrarias o ganaderas.

Las cifras no dejan lugar a dudas sobre el peso del sector forestal en Euskadi. Aporta el 1,5% del PIB y representa un 2,42% del empleo vasco, según datos de la Asociación de la Madera de Euskadi Baskegur, que además de su incidencia económica también subraya los beneficios medioambientales de las plantaciones de árboles.

La misma fuente establece que el impacto concreto sobre el empleo es de 18.000 personas en Euskadi y recuerda que la superficie arbolada en la CAV presenta uno de los ratios más altos de la Unión Europea. En concreto, calcula que abarca el 54% del territorio con 396.962 hectáreas. En esta área se distribuyen de forma casi similar las coníferas y las frondosas.

Según indica Baskegur, las frondosas representan el 53,5% de la superficie arbolada mientras que el 46,5% restante alberga coníferas. En relación con estas últimas, la asociación recuerda que el 86,8% de las talas autorizadas se centran en las coníferas y, de este porcentaje, una cantidad muy abultada es de pino radiata.

En el País Vasco, esta especie se han convertido en la base de la industria transformadora generando riqueza para los propietarios forestales y para toda la cadena de valor del sector. Además es la base de la bieconomía forestal sostenible que busca encontrar materiales que puedan sustituir a los derivados del petróleo.

La misma asociación indica en relación con la actividad forestal, que el sector vasco de la madera "está comprometido con la sostenibilidad", dado que se planta más de lo que se tala, por lo que "la madera es un recurso inagotable".

Según el inventario forestal de Euskadi, las existencias de madera ascienden a 62,6 millones de m³ con un crecimiento anual estimado de 3,4 millones de m³/año.

El volumen de madera total extraída al año es de 1,2 millones de m³, muy por debajo del recurso disponible. Por su parte, los stock de madera existente y los crecimientos anuales son netamente superiores a la utilización de madera. Si bien ya se ha mencionado que la aportación de esta industria al PIB vasco es del 1,5%, los ingresos estimados a las Administraciones Públicas como consecuencia del desarrollo de esta actividad suponen más de 309 millones de euros.

ventajas

El consumo de madera del País Vasco ofrece grandes ventajas que tienen que ver con la reducción de los costes, tanto económicos como medioambientales, que se derivarían de un transporte a larga distancia, y que repercuten en toda la cadena hasta llegar al consumidor final.

Desde Baskegur destacan también que se trata de una de las escasas materias primas con las que cuenta el País Vasco, con la particularidad añadida de que Euskadi es el único territorio en Europa en el que se cultiva el pino radiata.

Más superficie arbolada

A principios del siglo XX se calcula que en Euskadi había solamente un 20% de superficie arbolada. Hoy, este porcentaje crece y las cifras apuntan hasta un 26% de la CAE de bosque natural y el 55% está arbolado. Los actuales ratios de superficie arbolada muestran un importante aumento. La asociación también indica en su web que en los últimos 40 años se ha duplicado la cantidad de madera que contienen nuestras masas arboladas y se ha aumentado su superficie de inventario en inventario.