Nelson David M., acusado de cinco muertes en Bilbao, ha pedido al jurado en el último turno de palabra de la sesión que ha tenido lugar este lunes "que me condenen por lo que he hecho, no por lo que no". La sesión ha iniciado con la reproducción de una llamada telefónica que presuntamente el encausado tuvo con atención al cliente del banco del fallecido en octubre de 2021 con el objetivo de cambiar las claves de acceso.
A este audio le ha seguido un vídeo de una tienda en la que compró con la tarjeta de la víctima. Una vez concluida la prueba documental las partes han presentado sus informes definitivos. La Fiscalía se mantiene en su petición de 16 años y tres meses de prisión por homicidio, estafa continuada y hurto leve mientras que la acusación particular de Gehitu solicita 39 años.
Por otro lado, la defensa de Nelson David pide que prevalezca la presunción de inocencia de su cliente. En esta dirección, únicamente admite el delito de estafa por la extracción de dinero de cajeros con la tarjeta de la víctima.
La Fiscalía ha puntualizado que, después de las pruebas y declaraciones de testigos, "ha quedado acreditado que el fallecido no murió de muerte natural, sino que le mataron". Al mismo tiempo, considera probado que el acusado estaba "en casa de la víctima" porque " solo "desde la presencia del acusado en el domicilio del fallecido se puede explicar que una persona que no es el titular de la cuenta bancaria ni del teléfono haga una llamada al BBVA, pida el cambio de contraseña y se haga bizum y transferencia desde la cuenta del fallecido a la suya".
Respecto a la versión que el acusado en la que asegura que trabajaba con otras tres personas, la Fiscalía "adolece de una llamativa ausencia de pruebas" y añade que "no se ha aportado ningún dato de ninguna tercera persona que haya participado ni en éste ni en ningún caso". El abogado de la acusación particular y popular considera que a su entender, "no cabe otra conclusión lógica que afirmar" que "cometió un delito contra la vida" de la víctima.
Defensa del acusado
El abogado defensor ha rechazado las hipótesis sobre la forma en la que falleció la víctima. A su vez ha señalado que "nunca ha visto que se condene a nadie sin saber" el motivo "por el que murió la víctima" y ha apostillado que "no hay ni una sola prueba que incrimine ni de forma directa ni tampoco indirecta" a su cliente. "No la van a encontrar, porque no las hay", expone.
Además, se ha preguntado cómo es posible que su defendido "actuara solo durante tantos meses, de forma tan reiterada, sin dejar rastro ni huella alguna de los homicidios". En ese sentido, el abogado defensor ha situado al acusado "a escasos diez metros del portal" de la víctima y, por ello, ha matizado, la prueba telefónica le sitúa cerca de la vivienda. Para el abogado defensor, no hay "absolutamente nada que incrimine en el homicidio" al acusado, ni "una sola prueba que contravenga el principio de inocencia" porque "de verdad no lo hizo".