BILBAO. Las víctimas fueron abordadas en la calle y mediante amenazas con un arma blanca o el uso de la fuerza, les fueron sustraídos principalmente los teléfonos móviles.
Según ha informado el Departamento vasco de Seguridad, hacia las once de la noche del pasado jueves, día 4, una patrulla de la Ertzaintza en funciones de protección ciudadana identificó a un varón en la zona de La Ribera a quien se le requisó un teléfono móvil del que no pudo ofrecer una respuesta coherente sobre su procedencia y un cuchillo de unos 12 centímetros que portaba entre sus ropas.
A raíz de las investigaciones practicadas sobre estos objetos, se pudo determinar que dicho aparato de telefonía había sido sustraído a primera hora de la madrugada del mismo día a una joven cuando transitaba por la Avenida Lehendakari Agirre. El autor se acercó a la mujer y, tras esgrimir un cuchillo, le arrebató el citado teléfono.
Además, la descripción física del presunto delincuente se correspondía con el varón identificado por los agentes y que portaba el móvil de la víctima.
Esa misma madrugada del día 4, un varón sufrió un asalto similar en la calle Morgan. Tras ser empujado por un individuo y ser intimidado con un arma blanca, éste la sustrajo un teléfono móvil y diez euros, dándose seguidamente a la fuga.
Al día siguiente, en la tarde del día 5, se registró otro robo en la calle Bailén. En la denuncia presentada por un varón se relataba que un individuo le abordó por la espalda y se apoderó de su teléfono. Tres días después, hacia las diez y media de la noche y de nuevo en la Avenida Lehendakari Agirre, una mujer fue víctima de la sustracción de un teléfono móvil tras ser empujada por un hombre que, acto seguido, se lo arrebató de las manos.
Finalmente, en la noche del pasado jueves agentes de la Ertzaintza, en colaboración con efectivos de la Policía Local de Bilbao, localizaron al supuesto autor de éstos cuatro asaltos y procedieron a su detención.
