Hacer ejercicio de forma regular es una de las mejores decisiones que una persona puede tomar para mejorar su salud física y mental. Sin embargo, lo que se consume antes de la actividad física también juega un papel fundamental en cómo responde el cuerpo al esfuerzo. Uno de los errores más comunes es tomar ciertos medicamentos como el ibuprofeno antes de entrenar, creyendo que se previene el dolor muscular o se mejora el rendimiento. Nada más lejos de la realidad.

El cardiólogo Aurelio Rojas, conocido por divulgar contenido médico en redes sociales y con más de 400.000 seguidores, ha lanzado una seria advertencia sobre este hábito aparentemente inofensivo. En un reciente vídeo viral, explica por qué tomar ibuprofeno antes del ejercicio puede tener consecuencias graves para la salud.

Por qué tomar ibuprofeno antes de entrenar puede ser peligroso

Según el doctor Rojas, existen dos motivos clave por los que el ibuprofeno debe evitarse antes de la actividad física. El primero tiene que ver con el efecto que este antiinflamatorio no esteroideo (AINE) tiene sobre los riñones. El ibuprofeno reduce el flujo de sangre que llega a estos órganos, lo que puede derivar en insuficiencia renal, especialmente cuando el cuerpo se encuentra en estado de deshidratación, algo muy habitual durante el ejercicio intenso y prolongado.

El segundo y más preocupante motivo es que el ibuprofeno puede alterar la agregación plaquetaria, un proceso crucial en la coagulación sanguínea. Este efecto puede inducir la formación de trombos, es decir, coágulos que, si se desplazan hacia el corazón o el cerebro, podrían causar un infarto o un ictus. “No tomes ibuprofeno antes de hacer deporte sin haberte asegurado de que todo en tu salud está en orden”, advierte Rojas.

El riesgo se agrava con el esfuerzo prolongado

El riesgo que implica el uso del ibuprofeno se intensifica en deportes de larga duración, como correr una maratón o realizar ciclismo prolongado. En este tipo de actividades, el cuerpo pierde líquidos rápidamente, lo que provoca una disminución del volumen plasmático y un estrés adicional para los riñones. Si además se ha tomado ibuprofeno, el riesgo de daño renal se multiplica.

Asimismo, el esfuerzo físico prolongado incrementa la frecuencia cardíaca y la presión arterial, condiciones que, junto con una alteración en la función plaquetaria, pueden ser el caldo de cultivo perfecto para un evento cardiovascular grave.

El riesgo que implica el uso del ibuprofeno se intensifica en deportes de larga duración, como correr una maratón o realizar ciclismo prolongado. Freepik

Alternativas naturales al ibuprofeno antes del ejercicio

Para quienes buscan aliviar molestias leves o prevenir el dolor muscular sin recurrir a fármacos, existen opciones naturales respaldadas por estudios científicos y utilizadas tradicionalmente por sus propiedades antiinflamatorias. Estas alternativas no solo son más seguras, sino que pueden aportar beneficios adicionales a largo plazo.

  • Cúrcuma (Curcumina): La cúrcuma es un potente antiinflamatorio natural. Su compuesto activo, la curcumina, ha demostrado tener efectos similares a algunos AINE, pero sin sus efectos adversos sobre el riñón o el sistema cardiovascular. Puede tomarse en cápsulas o infusiones, y también añadirse como especia a platos antes del entrenamiento.
  • Aceite de oliva virgen extra: Rico en antioxidantes y grasas saludables, el aceite de oliva posee un efecto antiinflamatorio moderado gracias a un compuesto llamado oleocantal. Incluirlo en la dieta diaria puede contribuir a reducir el dolor muscular y articular de forma natural.
  • Magnesio: El magnesio es esencial para la función muscular y nerviosa. Favorece la relajación muscular y previene los calambres, comunes durante el ejercicio. Puede obtenerse a través de alimentos como frutos secos, vegetales de hoja verde y aguacate, o bien mediante suplementos, siempre consultando previamente con un especialista.
  • Ácido alfa-lipoico: Este antioxidante se encuentra de forma natural en alimentos como espinacas, brócoli o patatas. Ayuda a reducir el estrés oxidativo y tiene propiedades antiinflamatorias que lo convierten en una opción útil para quienes realizan deporte intenso. Puede tomarse también en forma de suplemento.

El magnesio es esencial para la función muscular y nerviosa. Freepik

Aunque el ibuprofeno es un medicamento de uso común y generalmente seguro cuando se emplea adecuadamente, su uso antes del ejercicio físico puede convertirse en un riesgo evitable. El mensaje del doctor Aurelio Rojas es claro: hay que ser conscientes del impacto que ciertos medicamentos pueden tener sobre el organismo en condiciones de esfuerzo, deshidratación o estrés metabólico.

Optar por alternativas naturales, cuidar la hidratación y consultar con un profesional antes de tomar cualquier fármaco es fundamental para proteger la salud a largo plazo. Hacer ejercicio debe ser una práctica que sume beneficios, no que los reste por decisiones poco informadas.