Una pierna fracturada es un accidente relativamente habitual, pero puede terminar provocando un trastorno excepcional. La persona pasa a ser dependiente y no siempre su familia, pareja o allegados pueden compatibilizar su cuidado con las obligaciones diarias. Y ante otros casos más severos, como episodios de estrés agudo o un ictus, la complejidad crece y la situación se complica todavía más. 

El escenario puede prolongarse meses y hacer que tanto la asistencia como la convivencia pasen a ser prácticamente insostenibles. La buena noticia es que hay soluciones para romper el círculo vicioso, como una estancia temporal en un centro especializado, que aportará a la persona afectada la atención que precise y descargará al mismo tiempo a su entorno cercano de la responsabilidad de su asistencia.   

“Hay personas que vienen al centro a hacer recuperación o en un proceso agudo que ha producido un deterioro de su capacidad funcional y aumento de la dependencia, aunque las fracturas de fémur y pelvis tras una caída son los casos más habituales”, explica Isabel Galán, directora de DomusVi Ribera (Bilbao).

Los centros de la compañía líder en España en servicios sociosanitarios ofrecen atención, cuidados y tratamientos pensados tanto para largas estancias como para residencias temporales, relacionadas, por ejemplo, con etapas de convalecencia y rehabilitación.

Y es que, al menos en España, muchos de los cuidadores principales son los propios cónyuges, que suelen tener la misma edad de la persona dependiente o incluso superior, un hecho que puede comportar necesitar de este tipo de programas de corta estancia.

"Hay personas que vienen al centro a hacer recuperación o en un proceso agudo que ha producido un deterioro de su capacidad funcional y aumento de la dependencia, aunque las fracturas de fémur y pelvis tras una caída son los casos más habituales”

Los profesionales realizan una primera valoración para establecer las necesidades específicas de cada usuario. Posteriormente, se coordina una puesta en común entre los diferentes especialistas para establecer un plan de intervención personalizado e individual. “Sentirse arropados por todo el equipo hace que el proceso sea más llevadero y agradable. No olvidemos que los primeros días pueden ser difíciles tras un proceso agudo donde ha habido una pérdida de autonomía y es necesario un periodo de convalecencia”, detalla Isabel Galán.

Fisioterapia y actividades

La rehabilitación profesional es una de las claves para recuperar o minimizar las limitaciones de las personas que acuden a los centros. Y se basa en trabajar tanto el cuerpo como la mente. El cuerpo se adecúa con fisioterapia, que aporta beneficios físicos y también psicosociales, y las actividades refuerzan la interacción y la mejora del estado de ánimo.

“Nos podemos encontrar con pacientes que, tras una fractura de cadera y sin poder hacer pie durante cuatro semanas, luego es incapaz de sostener su propio peso, por eso es tan importante la fisioterapia”, asegura la directora de DomusVi Ribera. Pero también es importante el trabajo de socialización. “Trabajamos para que se sientan en su hogar intentado aportar un entorno familiar, siendo cercanos y conociendo en profundidad a las personas a través de su historia de vida”, añade.

La rehabilitación profesional es una de las claves para recuperar o minimizar las limitaciones de las personas que acuden a los centros. DomusVi

La persona puede socializar, entablar amistades y disminuir la dependencia de su familia. Y puede ser, además, una buena opción para experimentar con los recursos profesionales residenciales por si en el futuro se requieren, un supuesto cada vez más común, porque España es el país de la UE con mayor esperanza de vida, 84 años en 2023, según los últimos datos del informe Eurostat.

En las mejores manos

Con más de 30 años de experiencia al servicio de las personas y sus familias, DomusVi es la compañía líder de España en servicios sociosanitarios y representa un valor seguro tanto para largas estancias como para residencias temporales.

Al margen de sus grandes números y dimensiones, la empatía y la cercanía siguen siendo pilares de esta marca, que aboga por una máxima clara: personas que cuidan de personas. 

La empatía y la cercanía siguen siendo pilares de DomusVI, que aboga por una máxima clara: personas que cuidan de personas.

DomusVi posee una amplia experiencia en ofrecer terapias y tratamientos especializados, la atención y los recursos necesarios y específicos en convalecencia y rehabilitación, con un trato personalizado, cercano y familiar, con el objetivo último de acelerar el proceso de recuperación.

DomusVi en Bizkaia


El grupo cuenta en Bizkaia con seis centros dedicados al cuidado de las personas mayores en los que se garantiza unos servicios de calidad. Con unas instalaciones confortables y adaptadas y un modelo de atención centrada en la persona. Gracias a un cualificado equipo de profesionales especializados, una atención individualizada y un trato familiar, los residentes pueden sentirse en cualquier centro como si estuvieran en su propio hogar. Se ofrecen estancias permanentes y temporales.

Para más información, visita domusvi.es o llama al 900 456 585