De todos es sabido que hay muchas personas que viven de la droga y que hay algunas que buscan a posibles compradores en la propia calle, ofreciéndosela a quien creen que puede ser un potencial consumidor. Pero claro, esa búsqueda activa tiene sus riesgos, porque quien vende no sabe nada de la persona a la que le está planteando la venta, más allá de un aspecto físico que le pueda motivar a dirigirse a ella. Y por eso lo que iba a ser un negocio puede terminar en comisaría.

Así, la Policía Local de Málaga detuvo hace unos días a un hombre de 23 años como presunto autor de un delito contra la salud pública, después de que les ofreciera droga a unos agentes que patrullaban a pie y de paisano por el centro de la ciudad andaluza y a quienes el delincuente se lo puso en bandeja para poder efectuar el arresto.

"La mejor cocaína"

Sucedió pocos minutos después de la medianoche del 15 de julio, cuando el joven se cruzó con los policías locales. Según explica el Cuerpo policial en un comunicado, el hombre los saludó y les preguntó de dónde eran y si necesitaban algo, para ofrecerles a continuación la droga.

Los agentes quisieron sonsacarle más información antes de revelar su identidad y le preguntaron si llevaba la sustancia encima. Él les respondió que sí y los invitó a acompañarlo a un lugar más retirado para que así pudieran probar "la mejor cocaína de Málaga". También les comunicó su precio: les vendía un gramo por sesenta euros, pero les avisaba que les salía más económico si compraban dos gramos por cien euros.

Desvelan su identidad

Los policías de paisano fingieron querer realizar la transacción y cuando el joven sacó el envoltorio se identificaron, le intervinieron la sustancia y procedieron a su detención. Además, en el cacheo le localizaron 107 euros que llevaba por su presunta procedencia ilícita a través de la venta de la droga. En el pesaje, la sustancia, que al parecer era cocaína, finalmente arrojó un peso de 0,55 gramos.

En lo que va de este año 2025, la Policía Local de Málaga ha detenido a un total de 79 personas por delitos contra la salud pública y ha levantado 1.807 actas por consumo o posesión de drogas o sustancias estupefacientes. Lo que no es tan habitual es que se les haga un ofrecimiento a sus propios agentes como ha sucedido en este caso.