El consejero de Seguridad del Gobierno vasco, Bingen Zupiria, ha asegurado este viernes que las personas que se enfrentaron a la Falange y a la Ertzaintza el pasado domingo en Vitoria-Gasteiz tuvieron "un comportamiento totalitario y utilizaron la violencia, y eso también es fascismo".

En una entrevista concedida a ETB1, recogida por Europa Press, Zupiria ha considerado que el viceconsejero de Seguridad, Ricardo Ituarte, "respondió bien" en su reacción a los incidentes ocurridos en la capital alavesa al decir que "la concentración de fascistas ha encontrado lo que buscaba: la respuesta de los fascistas vascos".

Así, el consejero de Seguridad ha señalado que tiene 64 años, que ha pasado "más de 40 frente a la violencia de ETA" y que "en muchas ocasiones oí en la calle aquello de 'Zuek ere faxistak zarete' ('Vosotros también sois fascistas'), por lo que no entiendo muy bien por qué ahora nos hemos puesto tan nerviosos en torno a ese término".

"Uno de los significados de la palabra fascismo es pretender imponer tu voluntad por medio del autoritarismo y de la violencia, y esos jóvenes que allí actuaron de manera violenta tuvieron un comportamiento totalitario y utilizaron la violencia, y eso también es fascismo", ha insistido.

"Discutible" permitir a la Falange concentrarse

En este sentido, ha indicado que "puede ser discutible" si se debe permitir a la Falange realizar una concentración, aunque ha asegurado que, "si no hubiera aparecido nadie en aquella plaza y las protestas contra los fascistas se hubieran hecho en las calles aledañas, no hubiera ocurrido nada".

Así, se ha referido a las organizaciones "alegales" que se concentraron a unos metros de la plaza de la Provincia en la que la Falange realizó su acto, y ha señalado que "no han acudido a legalizar su situación y normalmente no comunican cuando hacen manifestaciones y concentraciones".

Zupiria ha dicho que "habría que preguntarles a ellos" por qué razón no comunican sus actos, aunque ha considerado que "seguramente no lo hacen porque no aceptan la naturaleza de este Estado opresor ni la de la Ertzaintza opresora, y piensan que están por encima de todo". En este sentido, ha recordado que "no hay que conceder ningún permiso" para poder realizar una manifestación o una concentración, sino que basta con comunicarlo para que se lleven a cabo.  

Enseñas franquistas y palos para agredir

Asimismo, Bingen Zupiria ha afirmado que, además del expediente que se ha abierto al promotor del acto de la Falange por exhibir enseñas franquistas y usar palos para agredir, "se van a abrir más expedientes" a participantes en dicha concentración.

El consejero de Seguridad ha explicado que hay "una persona que comunicó que tenían intención de realizar una manifestación en nombre de esa organización y adquirió unos compromisos que, como fueron quebrantados, deberá responder por ello como responsable de esa organización". "Luego hay otros comportamientos de otras personas concretas, de los que esas personas son responsables y, por lo tanto, deberán responder por ello", ha añadido.

Además, y preguntado por la razón por la que nadie de la Falange fue detenido durante los altercados, el consejero de Seguridad ha respondido "las cosas fueron muy confusas" y que desde el primer momento ha reconocido que "la situación fue muy difícil de gestionar para la Ertzaintza".

"Se tomaron unas decisiones, y la primera fue garantizar la seguridad de los ciudadanos haciendo frente a los altercados que se estaban generando en aquella plaza. Luego vendrá, tanto en el caso de unos como en el de los otros, pedir responsabilidades a cada uno", ha indicado. 

Destrozos tras los disturbios registrados cuando varias personas han tratado de impedir la celebración de un acto de Falange Española con el lanzamiento de todo tipo de objetos, este domingo. ADRIAN RUIZ HIERRO

Investigación interna

Por último, Bingen Zupiria se ha referido a la investigación interna puesta en marcha por la Ertzaintza debido a las lesiones sufridas por un manifestante en los altercados contra la Falange. "Hay una persona que tiene la mandíbula rota por un pelotazo de la Ertzaintza", ha dicho.

Así, ha explicado que la Ertzaintza tiene unas instrucciones que determinan que el uso de la fuerza se debe llevar a cabo "de manera proporcionada y progresiva", y que para ello se decide "qué armas y municiones se pueden utilizar". "En estos momentos hay que investigar si el uso de la fuerza que se hizo es compatible con los criterios que están en vigor. No está en duda si la Ertzaintza debía utilizar o no la fuerza, sino si esa fuerza que usó coincide con los criterios existentes", ha aclarado.