Los pactos entre las distintas fuerzas políticas definirán este sábado en los plenos de constitución de los ayuntamientos la composición de los 184 municipios de Euskadi en los que ningún partido ha logrado la mayoría absoluta que garantiza la elección de su candidato.

El PNV es el partido que, de entrada, gobernará más localidades ya que las urnas le dieron el 28 de mayo 33 mayorías absolutas, algo que EH Bildu consiguió en 21 municipios, el PSE en 8 y el PP en 1 (Baños de Ebro, en Araba).

En total hay 67 pueblos donde el partido ganador gobernará desde la tranquilidad que da la mayoría absoluta. En los 184 restantes la Alcaldía será para la lista más votada salvo que otros partidos lleguen a acuerdos que sumen como mínimo la mitad de los concejales más uno.

Hay varias fórmulas para lograr la llave de los ayuntamientos por decidir: la reedición del pacto de estabilidad PNV-PSE, la suma de EH Bildu y Elkarrekin Podemos, los votos del PP para evitar que la coalición abertzale gobierne e incluso la postura de los independientes, que pueden inclinar la balanza en varias plazas.

BIZKAIA

    En Bizkaia hay una quincena de alcaldías que estarán en juego el sábado entre candidatos de PNV y EH Bildu, aunque se da por hecho que en Durango el voto "gratis" del PP quitará la alcaldía a EH Bildu para otorgársela al PNV y que Elkarrekin Podemos-IU respaldará en otros tres (Elorrio, Sopela y Urduliz) a la coalición abertzale para lograr la mayoría absoluta.

Los otros 11 municipios en una situación incierta dependerán del voto de diferentes grupos independientes. En Galdakao parece factible de EH Bildu mantenga la alcaldía reeditando el pacto con los dos grupos independientes, lo mismo que podría pasar en Arrigorriaga.

Entre estos ayuntamientos destacan Bermeo (donde ganó el PNV con 8 ediles ante los 5 de Bildu pero quien decide es el grupo Guzan con 4 concejales) y Gernika, formado por 6 de Bildu, 6 del grupo del alcalde José María Gorroño (que antes fue candidato y regidor tanto de Bildu como del PNV) y 5 del PNV.

Otras candidaturas creadas por exalcaldes del PNV también decidirán en Mundaka (donde posiblemente den la alcaldía a Bildu quitándosela al PNV), Zaratamo, Abadiño o Barrika.

Los grupos vecinales pueden conseguir la "makila" al ser primera fuerza en Gorliz (5 ediles frente a 4 tanto de Bildu como del PNV) o con el apoyo de EH Bildu para desbancar al PNV en Gatika y Zalla.

ARABA

    En más de la mitad de los municipios de Araba, en concreto en 32, no hay incógnitas sobre quién gobernará durante los próximos cuatro años, ya que los resultados del 28 de mayo dejaron mayorías absolutas en todos ellos.

En los 19 restantes serán necesarios los pactos para formar gobiernos estables y esos acuerdos pueden derivar en que el partido más votado no acceda a la Alcaldía.

Es el caso de Gasteiz, donde EH Bildu tiene muy difícil gobernar tras la reedición del pacto PNV-PSE para apoyarse mutuamente en las instituciones y el anuncio del PP de darles sus votos "gratis" para evitar un gobierno abertzale. Así, salvo sorpresa de última hora serán los socialistas los que lideren la institución.

Más en el aire está el Ayuntamiento de Llodio, donde EH Bildu ha ganado por apenas 29 votos de diferencia. La llave la tienen los independientes de Omnia, que decantarán la balanza a favor de la coalición abertzale o del PNV, que ha gobernado en esta legislatura.

EH Bildu podría también perder su tradicional feudo de Legutio en virtud del pacto de estabilidad PNV-PSE y las plazas de Oyón, Kuartango y Zigoitia si como en Vitoria los populares respaldan a los candidatos del PNV para que no gobiernen los soberanistas.

Las alianzas para hacer pinza al ganador también pueden volverse en contra del PP ya que en Laguardia y Labastida la suma de PNV y EH Bildu puede impedirle hacerse con la Alcaldía en favor de los nacionalistas como ya ocurrió hace cuatro años.

GIPUZKOA

    En Gipuzkoa, EH Bildu se convertirá en la formación que obtenga mayor número de alcaldías, aunque para acceder a algunas de ellas necesitará del anunciado apoyo de Elkarrekin Podemos.

Si los pactos PNV-PSE y EH Bildu-Elkarrekin Podemos se cumplen, las alcaldías caerán en poder de la lista más votada en todos los municipios importantes, con al excepción de Azkoitia, donde ganó el PNV, y Legazpi, localidad en la que EH Bildu obtuvo el mayor número de votos.

Con el apoyo de Elkarrekin Podemos, EH Bildu se hará con la Alcaldía de Azkoitia, mientras que, el pacto PNV-PSE permitirá a los jeltzales arrebatar a la coalición soberanista la de Legazpi.

Las alcaldías de los cuatro municipios más grandes no cambiarán. Eneko Goia (PNV) volverá a ser primer edil donostiarra, José Antonio Santano (PSE) será reelegido en Irun -salvo sorpresa-, Aizpea Otaegi (EH Bildu) seguirá como regidora de Errenteria, y el socialista Jon Iraola hará lo propio en Eibar.

El pacto PNV-PSE permitirá a los jeltzales hacerse con las alcaldías de Donostia, Elgoibar, Legazpi, Urnieta, Urretxu y Zarautz, a las que sumarán las tres localidades en las que fueron mayoría absoluta, Aia, Beasain y Lazkao.

El PSE-EE logrará previsiblemente encabezar los gobiernos de Irun, Eibar, Lasarte-Oria y Zumarraga, además del de Larraul, donde fueron mayoría absoluta.

El otro eje, el formado por EH Bildu-Elkarrekin Podemos, permitirá a la formación de Arnaldo Otegi gobernar en Andoain, Arrasate, Deba, Errenteria, Oridizia y Pasaia, además de la mencionada Azkoitia, donde ganó el PNV. A estos municipios hay que sumar 46 pequeñas localidades en las que logró mayoría absoluta.

Mención aparte merece Hondarribia, donde Abosanitz, una escisión de Bildu, logró doblegar al PNV, aunque para lograr la Alcaldía necesitará del apoyo de la formación independentista.