La consejera vasca de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantza Tapia, se ha mostrado a favor "sin ninguna duda" de aplicar las medidas anunciadas por el Gobierno estatal este lunes, 1 de agosto, aunque ha rechazado la vía punitiva para que se cumplan. "Las multas, para mí, no son el camino", ha afirmado.

Tapia ha respondido así a las preguntas que los periodistas le han lanzado a este respecto la mañana de este miércoles en Aduna, dentro de la visita a la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) del Oria Medio, donde la consejera ha dado a conocer la planificación hidrológica del Gobierno vasco para el periodo 2022-2027.

Asimismo, ha recalcado la necesidad de que las medidas de eficiencia energética se conjuguen con aquellas que se han ido aplicando debido a la pandemia, como la ventilación de los espacios cerrados. También ha incidido en escuchar "los problemas" de la ciudadanía. Tapia ha recordado especialmente al sector del comercio y de la hostelería, que "con lo que han sufrido durante dos años", ahora es momento de saber "cuáles son sus problemas y cómo pueden hacer frente a todas estas cuestiones de manera eficiente".

Respecto a la iluminación de espacios exteriores, Tapia ha manifestado que se puede bajar en el caso de monumentos y edificios culturales, pero no así cuando suponga un aumento de la inseguridad. "Nuestras calles tienen que ser seguras; hemos pasado mucho tiempo y hemos tomado muchas medidas para que podamos andar seguros en la calle", ha subrayado, haciendo particular mención a la integridad de las mujeres.

La consejera, que ha informado que el Gobierno vasco lleva desde la semana pasada, antes de la comunicación de las medidas estatales, analizando su plan de contingencia, ha mencionado el camino realizado hasta ahora por el ejecutivo vasco, que "en los últimos 40 años ha puesto en marcha distintos planes" en el ámbito de la sostenibilidad. Unas políticas que "vienen de lejos" y han permitido, según Tapia, que hoy en día en Euskadi se consuma un 50% menos de energía para una misma producción que hace cuatro décadas.