Bilbao - El vicepresidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, advirtió ayer de los perniciosos efectos en forma de boicot que podrían sufrir los productos catalanes en el mercado estatal si finalmente se aplica la Declaración Unilateral de Independencia (DUI). Además de llamar a la “cordura” para que no suceda, Garamendi alertó de las nocivas consecuencias económicas para los productores. Y es que no solo sería una “mala noticia” para la economía de Catalunya, “sino también para España”.
El número 2 de la patronal salió así al paso de unas declaraciones del presidente de Freixenet y de la Cámara de Comercio de España, José Luis Bonet, quien aseguró que el sector vinícola catalán, que elabora “productos emblemáticos” como el cava, ya estaría padeciendo las “reacciones” que perjudican las ventas. Bonet comparó la situación abierta con el boicot padecido “hace quince años cuando el señor (Josep Lluis) Carod Rovira se dedicó a hacer declaraciones que no tenían ningún sentido”. El dueño de la emblemática marca, que el domingo estuvo en primera fila de la manifestación unionista contra la independencia de Catalunya, recordó así lo acontecido en 2004, cuando el entonces líder de ERC instó a que los catalanes se movilizaran en contra de la candidatura de Madrid a los Juegos Olímpicos de 2012 después de que la selección de hockey sobre patines no fuera reconocida en el ámbito internacional. El contraboicot español, que se mantuvo durante dos años al verse recrudecida la polémica política por el Estatut, dejó tocadas las ventas de cava.
La situación podría reproducirse ahora. Al menos, es lo que temen las grandes empresas del sector del cava. Pero también los altos cargos de la CEOE. Garamendi, que afirmó que “las grandes empresas han marcado el camino” con su salida y “las pequeñas van detrás”, ofreció algunos datos sobre la situación que podría abrirse si se declara la independencia. Catalunya “vende en España 46.000 millones de euros; en Europa, 37.000 millones, y al resto del mundo, 22.000 millones. Vende mucho más a Aragón que a Francia, a Murcia que a China y parecido o más a Cantabria que a Estados Unidos”. - DEIA