donostia - Sin sorpresas, la candidata del PNV a liderar las Juntas, Eider Mendoza, fue elegida ayer presidenta de la Cámara por mayoría simple en segunda votación. Con el apoyo de la bancada jeltzale, la única candidata a dirigir la Mesa estará acompañada en el máximo órgano de gobierno del parlamento guipuzcoano por Ernesto Merino (EH Bildu) en la vicepresidencia primera, Julio Astudillo (PSE) en la vicepresidencia segunda, Ione Cisneros (Podemos) en la secretaría primera y por su compañero de partido Xabier Ezeizabarrena en la secretaría segunda.

La entente cordiale que los cinco partidos con representación en la Cámara -incluido el PP- firmaron sirvió para que las cuatro fuerzas más votadas accedan a la Mesa. En ella no estará el popular Juan Carlos Cano, que renunció a “acaparar puestos de responsabilidad” para centrarse en el “mensaje político” durante esta legislatura, pese a que contaba con el apoyo de EH Bildu y de Podemos, que en el pleno de ayer debutó en una institución vasca, si hubiese querido acceder a una de las dos secretarías. Al final es el PNV, que junto al PSE tiene la mayoría absoluta del órgano, quien cuenta con dos asientos en la Mesa.

Uno por uno, los junteros -todos menos María Valiente, de Podemos, baja por enfermedad- fueron llamados a sus escaños según el orden en el que se acreditaron ante las Juntas. El socialista Julio Astudillo, el más veterano del hemiciclo, presidió una Mesa de Edad en la que estuvo acompañado por los jóvenes Imanol Gude (Podemos) y Ainhoa Usandizaga (PNV).

Como estaba previsto, Eider Mendoza, acompañada de su marido, sus padres y miembros del partido como Eneko Goia, Maite Peña, Imanol Lasa y Carlos Ormazabal en la Tribuna de Invitados, necesitó la segunda vuelta, al cosechar los 18 votos del PNV y 32 en blanco. Aun así, Astudillo estaba a punto de nombrar presidenta a Mendoza tras el primer escrutinio, donde la jeltzale -cuya candidatura fue presentada por la nueva portavoz del PNV en las Juntas, Maria Eugenia Arrizabalaga- no obtuvo la mayoría absoluta.

Varios apoderados, entre los que se encontraba la propia Mendoza, y los propios letrados de la Cámara, adonde regresó el exararteko Iñigo Lamarca, le advirtieron del error.

La segunda votación tuvo menos misterio y el más apoyado fue el miembro de Aralar Ernesto Merino y el segundo, Julio Astudillo, ambos con los 17 y 9 apoyos de cada bancada respectiva. Para que Podemos (con 5 apoyos) accediera a la secretaría primera y no la ocupara el PNV, EH Bildu coincidió en apoyar a Ione Cisneros frente a Xabier Ezeizabarrena.

Con otros invitados como el secretario general del PSE en Gipuzkoa, Iñaki Arriola y otros cargos socialistas como Mikel Durán, Susana Corcuera, Rafaela Romero y el primer edil de Zumarraga, Mikel Serrano, entre otros; los exjunteros Maite Sarasua e Iñigo Manrique; la jefa en funciones del Ejecutivo, Agurne Barruso; y el propio Gobierno foral en funciones en el hemiciclo, Mendoza puso la lucha contra la crisis entre lo sprincipales objetivos de la legislatura para “avanzar como pueblo sin que nadie quede arrinconado, garantizando todos los derechos a todas las personas”.

En un discuyrso en el que agradeció a sus allegados, también consideró “prioritario recuperar una convivencia basada en el respeto, en la aceptación mutua y en el compromiso con la dignidad humana como principio jerárquicamente superior”. Al igual que destacaron otros portavoces ante la prensa, Mendoza cerró su intervención con una apuesta por el diálogo “desde el respeto al contrincante político y sobre todo desde el respeto a los compromisos adquiridos con la ciudadanía” y tratando de “mantener el contacto directo con los guipuzcoanos”.