bilbao. Seguía inspirado por la mística de entrar en la liguilla de cuartos de final Ekaitz Saralegi cuando apareció Oinatz Bengoetxea y el duelo, que asomaba como un encuentro de esos en los que el oxígeno toma situación capital, iba 3-1 en el Atano III de Donostia. Estaba en vena el amezketarra. Y el leitzarra, mientras, afilándose el colmillo, forjado en horas y horas de frontón. Por eso, Oinatz es un pelotari travieso, al que le gusta reinar delante, disfrutar, pero que jamás desdeña el trabajo, el sufrimiento, el lanzarse desde los cimientos de la defensa a exprimir un partido y a su adversario. Y Bengoetxea otorgó un correctivo soberano sobre su adversario a base de moverle en la cancha. Tras el 3-1, una tacada de diecisiete tantos consecutivos: un hachazo al partido, un buen tajo a Saralegi y un premio para su bolsillo.

Forjó la victoria el leitzarra jugando mucho con cabeza. Supo mover al amezketarra y secuestrar su zurda de campanillas en el remate, esa que fueron incapaces de recortar en las anteriores eliminatorias dentro de la jaula Mikel Urrutikoetxea y Titín III. Apuntado en la hoja de ruta el modo de derrumbar el ataque de un delantero que disfruta en esas lides, pero que en defensa hace aguas si tiene que dar ritmo al cuerpo, Oinatz triunfó. Abrió gas tras el 3-1 Bengoetxea VI y rompió el partido. Y eso que hasta entonces Saralegi parecía capaz de dar la campanada en territorio guipuzcoano. Empezó dando la vuelta a una cortada de Oinatz con un dos paredes, un gancho y una parada al txoko. Puro Saralegi. Puro caviar con la zurda.

Y diecisiete dentelladas consecutivas aparcaron cualquier oportunidad de revuelta para el amezketarra. Encontró la senda Oinatz desde sus piernas de relámpago. Pero, primero, apostó por darle potencia al saque para forzar que Ekaitz regalase y reinar con la dejada. De hecho, con esta suerte sumó la mitad de sus tantos en juego, siete. Los suficientes para abrir brechas. Oinatz forzó hasta el límite en el primer tramo del envite a Saralegi y este se partió -hasta el 3-3 hubo 92 pelotazos-. Mientras que, Oinatz, como una lanza, no se rompe, no se doblega; Bengoetxea, enchufado físicamente, tiene un sexto sentido que le hace capaz de lo mejor con un tren inferior tan rápido como un rayo. Además, la suerte le sonrió y cuando le tocó arriesgar a su contrincante, el tanto murió en el colchón o en la contracancha. Asimismo, el guipuzcoano al defender tampoco estuvo a la altura. Lanzó el delantero de Leitza cargas de profundidad a la zurda de su adversario y le salió la jugada a la perfección. Ni un fallo en ese tramo. Sensaciones imperiales. Un relámpago.

Una vez tejida la tela de araña sobre el amezketarra, Bengoetxea VI se dedicó a esperar, a hacer su trabajo y a recoger los frutos. La confianza de un Saralegi dominado, fuera de su radio de acción por gracia y obra de Oinatz, quedó mermada y solamente pudo sumar en las postrimerías, ya sin ningún tipo de reacción en la manga, porque el luminoso había pasado del 3-1 al 3-18 y no había más que hacer. El maquillaje llegó tras un tanto duro en el que Ekaitz pudo conectar el gancho -a la segunda- con Oinatz vendido. Después sumó un saque, pero volvió a perderlo en el siguiente porque la receta del leitzarra era tremendamente efectiva. Volvió a moverle y a reinar con las dejadas y las cruzadas, que ayer resultaron letales. Así, hasta el 8-22, con tres zarpazos de Saralegi que apenas inquietaron a Oinatz. De este modo, el delantero de Leitza da un paso de gigante para entrar en las semifinales con una renta enorme en su casillero de tanteo, muy por encima de la de sus contrincantes.

Duración: 51:21 minutos de juego; 10:34 minutos de juego real.

Saques: 1 de Saralegi (tanto 5) y 1 de Bengoetxea VI (tanto 13).

Faltas de saque: Ninguna.

Pasas del Cuatro y Medio: Ninguna.

Pelotazos: 253 pelotazos a buena.

Tantos en juego: 6 de Saralegi y 14 de Bengoetxea VI.

Errores: 7 de Saralegi y 1 de Bengoetxea VI.

Marcador: 1-1, 3-2, 4-18, 5-19, 6-21 y 8-22.

Botilleros: Ejercieron de botilleros Asier Olaizola (con Ekaitz Saralegi) y Asier García (con su primo Oinatz Bengoetxea).

Apuestas: De salida se cantaron posturas de 100 a 60 favorables a Bengoetxea VI.

Incidencias: Partido correspondiente a la liguilla de cuartos de final del grupo 2 del Cuatro y Medio de Primera de la LEP.M disputado en el frontón Atano III de Donostia. Algo más de media entrada.