Bilbao - El Bilbao Basket vuelve a sentir la cercanía de la competición tras dos fines de semana seguidos sin un partido que echarse a la boca. “Es un equipo nuevo”, expresó ayer Veljko Mrsic mientras miraba el entrenamiento de los suyos, un conjunto que desde su última comparecencia oficial en cancha se ha reforzado con las llegadas de Nikola Rebic y Ben Bentil, al tiempo que ha prescindido de Ricardo Fischer. “Después de tres semanas hemos podido trabajar todos juntos, con estas dos nuevas incorporaciones y con el regreso de los que estaban con las selecciones. Es un nuevo equipo y espero que podamos jugar mejor. Igual mañana, contra el Gipuzkoa Basket, todavía es pronto para los nuevos, pero seguro que van a aportar la energía y la juventud que tienen. No podemos esperar grandes cosas en ataque, pero sí energía”, desgranó el técnico croata, que también se refirió al adiós del base brasileño: “No estábamos bien y hemos buscado la forma de mejorar ahora y de cara al futuro. Hemos encontrado un jugador más joven, que entra en nuestros planes económicos y que creemos que nos puede echar una mano. A Ricardo le agradezco todo lo que ha aportado, pero en el deporte profesional a veces hay que tomar decisiones que no nos gustan”.
“Sí, creo que sí”, respondió Mrsic cuando se le cuestionó sobre si cree que tiene equipo para luchar con garantías por la permanencia, antes de añadir que “los jugadores trabajan bien; vamos a ver hoy (por ayer) el primer entrenamiento de Todorovic después del parón y ahora, con Bentil y Rebic, tenemos más jugadores que nos puede aportar físico. Además, pudiendo poner más tiempo a Álex (Mumbrú) como alero vamos a tener mayor presencia física en cancha”. El regreso del capitán a la que ha sido su posición habitual hasta este año no será algo puntual, sino una constante: “Tal y como pensamos ahora, va a ser más un cambio de posición que una opción. La opción va a ser poder ponerle de cuatro. Así tendremos mucha mayor presencia física en el campo, algo que últimamente nos faltaba cuando salíamos con jugadores de banquillo como Redivo, Fischer o Vucetic. Seguro que ahora tendremos mucha más potencia física y estaremos mejor”. Con el regreso de Mumbrú al puesto de alero, los minutos en la rotación exterior se encarecen y “veremos cómo vamos a repartirlos, cada uno debe ganárselos y demostrar que puede jugar y aportar más”.
Regularidad defensiva Mrsic definió como “un sprint largo” los catorce duelos que quedan para acabar el curso e incidió en que “cada uno es importante”. “Vamos a ir partido a partido con el objetivo de jugar mejor, de mejorar nuestra defensa. Nos ha faltado regularidad defensiva últimamente y creo que con los últimos fichajes podemos recuperarla”, destacó, al tiempo que se mostró muy poco partidario de marcar en rojo partidos como el de mañana: “Es difícil hacer eso. En los tres últimos meses hemos ganado algún partido con el que no contábamos, como el de Unicaja, y hemos perdido otros que pensábamos que iban a ser más fáciles. Hay que ir partido a partido, no poner presión extra al jugador hablando de duelo vital. Los partidos vitales pueden llegar a final de temporada, ahora hay que jugar cada encuentro igual”.
Sobre el choque de mañana, dijo que “es el primer partido después del parón, tenemos dos jugadores nuevos, muchos que han estado con sus selecciones... Posiblemente el equipo no va a estar muy fluido, sobre todo en ataque, pero en defensa espero una intensidad que no hemos tenido antes y que la tengamos durante más rato. El rival es un buen equipo. Ha demostrado que puede jugar bien contra equipos buenos, pero también ha perdido partidos que pensaba que iba a ganar. Es un buen equipo que está dos victorias por encima de nosotros, por lo que hay que salir con todo”.