España sumó su segunda victoria en la Eurocopa de Suiza y lo hizo de nuevo con goleada al ganar por 6-2 a Bélgica, en un partido donde fue de menos a más y donde dejó su mejor imagen tras el descanso, aunque tampoco firmó un choque redondo, con alguna duda atrás, pero que le deja a las puertas de los cuartos de final. No le salió un partido tan perfecto a la campeona del mundo como el del estreno y no lo logró desenredar hasta la locura que se vivió en el arranque de los segundos 45 minutos. Su rival, correoso, trató de sobrevivir aprovechando sus pocas ocasiones y defendiendo con orden, pero se fue deshaciendo poco a poco precisamente tras haber logrado el 2-2. A partir de ahí, bajo la batuta de Alexia Putellas, de nuevo MVP del choque, las de Montse Tomé metieron una marcha más y arrasaron a las belgas, aunque el marcador debe ocultar algunos desajustes a solucionar.
España se encontró con un partido mucho más incómodo que en el estreno. Bélgica salió con la lección aprendida de sus últimos duelos con las españolas y logró controlar el fútbol de la campeona del mundo, a la que le costó carburar sobre el terreno de juego del Stockhorn Arena de Thun. Sólo un envenenado centro de Vicky López, de nuevo titular por Aitana Bonmatí, que no encontró por poco a Claudia Pina llevó peligro real a la portería de Lichtfuss. Pero a base de insistir llegó el 1-0. Una combinación, en corto, terminó en los pies de Alexia Putellas y la doble Balón de Oro no perdonó en su disparo. Alegría efímera Bélgica igualó a renglón seguido en un saque de esquina muy cerrado que encontró el buen cabezazo de Vanhaevermaet. Sin embargo, la insistencia estatal tuvo el premio del 2-1, devolviendo la moneda al rival a balón parado. Irene Paredes, de vuelta tras su ausencia por sanción ante Portugal, se elevó imperial en el segundo palo para cabecear a la perfección un saque de esquina de Pina. Pese a esta buena ocasión y buenas prestaciones en el primer tiempo, Vicky se quedó en el banquillo para dejar su sitio a Bonmatí.
Entonces, primero Bélgica igualó por medio de Eurlings, que no perdonó un desajuste defensivo en un balón a la espalda y con mediación desde el VAR, un tanto que encontró esta vez la réplica instantánea de España, recuperando la delantera en el marcador gracias a Esther González tras ejecutar con maestría un sensacional pase de Putellas. A partir de ese momento, las belgas se apagaron anímica y físicamente y la campeona del mundo pudo por fin imponer su fútbol para sentenciar poco después el duelo. Paredes ganó otro saque de esquina en el segundo palo y Mariona Caldentey puso el 4-2 casi definitivo en diez minutos trepidantes y que permitió a Tomé ir repartiendo esfuerzos.
Bélgica se vio arrollada, se quedó sin argumentos y las ocasiones sólo tuvieron una dirección, aunque Nanclares metió una buena mano a un disparo lejano y se llevó otro susto con un gol anulado por poco. Claudia Pina, con un sensacional disparo, y Alexia Putellas, para coronar su gran partido, cerraron una goleada con aviso de cara a un futuro que se irá empinando poco a poco.