BILBAO. Tim Kempton Jr. confía en que “la transición” desde el baloncesto de la NCAA al de la Liga Endesa “no sea tan complicada como algunos piensan”. “Llego muy motivado y creo que estoy preparado para este reto”, aseguró en su presentación oficial como jugador del Bilbao Basket. En este paso le puede ayudar su padre Tim, que también militó en equipos europeos, en el sentido de “servir como el mejor guía en los momentos difíciles por haberlo vivido antes”. Sin embargo, “él no va a poder jugar por mí. Todo lo que pase en el día a día y en la cancha dependerá de mí y esa es mi responsabilidad”.
El exjugador de la Universidad de Lehigh, de 22 años y 2,08 metros, se siente “preparado”, pero es consciente de que las cosas van a ser muy diferentes para él. “Vengo de ser el foco de mi equipo en la NCAA y aquí tengo que buscar cómo impactar en el juego sin tener el balón en las manos. Debo sentir, vivir cómo juega el equipo y cuál es el rol que se me exigirá sin ser tan importante como lo era anteriormente en mi equipo y en el Bilbao Basket, donde hay gente con mucha más experiencia que yo”, comentó.
Kempton era el más alto en Lehigh “y por eso siempre he jugado de cinco en mi universidad. Pero tengo velocidad para jugar de cuatro y defender a ese tipo de jugadores”. “Me gusta tener el balón en las manos, jugar de cara por el perímetro y creo que podría adaptarme también a esa posición”, añadió.
Superado el jet-lag de los primeros días, Tim Kempton va entrando en el ritmo de los entrenamientos. El pívot estadounidense espera mantener “reuniones más profundas, con la mente abierta para ver cómo encajan mi juego y su estilo de entrenar” con Carles Duran y el cuerpo técnico “y ver cómo transcurre la pretemporada” para conocer cuál va a ser su encaje en el equipo, pero mientras tanto mantiene los ojos bien abiertos. “Estoy contento de haberme encontrado aquí a gente como Álex (Mumbrú) o Javi (Salgado) que crean una cultura de baloncesto y tienen mucha experiencia en todo tipo de situaciones y en todas las competiciones. Para mí es una gran ventaja poder aprender de ellos en estas circunstancias”.