DESDE pequeños a los que el patinete les llega casi más allá de la cintura a veteranos, como los jueces de la prueba, que superan la cincuentena y que se niegan a dejar la adrenalina del skate. Esta práctica engancha y dibuja sonrisas perpetuas. Por eso, los aficionados a este deporte han disfrutado a lo grande estos días en Getxo, sede de un campeonato internacional, como el Euskaltel Bowlzilla. La famosa pista de Arrigunaga acogió ayer la fase final, con algunos de los mejores riders del mundo en acción, y más de mil seguidores aplaudieron su admirable destreza. Unos 400 aficionados se aglutinaron en torno a la bañera de La Kantera y el resto se extendió por las campas para ver la competición desde las pantallas gigantes.

No fue el mismo fervor que el año pasado despertó el circuito Bowl-A-Rama en miles de personas, pero los responsables de la organización realizan un buen balance del estreno de esta competición en Getxo: “Estamos muy contentos. Esta es una prueba que pretende recuperar el skate originario. La modalidad del bowl está creciendo en popularidad y este campeonato refuerza el camino”, comentó el máximo responsable del Euskaltel Bowlzilla, el australiano Chad Ford. Además, esta vez, han sido tres días de exhibiciones y eliminatorias (tanto en la pista de Las Arenas como en la de Arrigunaga) y se han llevado a cabo una serie de actividades paralelas, por lo que, según apuntan desde la organización, “el público ha estado más distribuido”.

Berglind, campeón Los participantes se llevaron una buena impresión de la prueba. “El bowl es un desafío, técnicamente es muy complicado”, aseveró el sueco Kalle Berglind, un maestro de 17 años, que pese a las dificultades que halla en esta modalidad, se proclamó ganador ayer. Segundo fue el madrileño Danny León y tercero, el británico Alex Halford. “Nos parece fenomenal que se celebre una competición así en Getxo. En Bizkaia hay mucha afición”, comentaban los aficionados Jon Azurmendi, de Errenteria, y Mario González, asturiano afincado en Donostia; ambos con sus patinetes en la mano.