Bilbao. Las condiciones meteorológicas, duras y pasadas por agua, no impidieron que la II Bilbao Triatlón volviese a congregar a cientos de bilbainos alrededor de una carrera bautizada por la épica y sellada con un nuevo doblete vizcaino. Mikel Elgezabal, natural de Gernika y abonado al triunfo en la maratoniana prueba bilbaina, repitió en categoría masculina su victoria del año pasado, al igual que hizo entre las féminas una aclamada Virginia Berasategui, quien a pesar de su recientes problemas de rodilla, volvió a cruzar la línea de meta en primer lugar para delirio de los numerosos bilbainos que no dudaron en celebrar por todo lo alto la trabajada victoria de la triatleta bilbaina. "Debido a unos problemas de rodilla no sabía si iba a poder disputar esta carrera, pero pasase lo que pasase al final no quería perder la oportunidad de correr aquí y delante de toda esta gente. Al final he podido ganar y la verdad es que es muy importante y emocionante para mí", reconocía Berasategui instantes después de consumar su victoria, presa todavía de la más afable de las emociones.

Y no era para menos, la prueba, que dio comienzo a las 14.15 horas con el salto al agua de los 650 triatletas inscritos para la carrera, se disputó de principio a fin con el frío y la lluvia bilbaina como invitados de excepción. En los 1.900 metros a nado por la ría bilbaina, Fraser Cartmell -tercero en la clasificación final- fue el primero en completar el recorrido entre los hombres, con un total de 2 minutos y 8 segundos de margen sobre el a la postre campeón Elgezabal, quien puso velocidad de crucero encima de la bicicleta para basar su victoria en los 90 kilómetros con doble ascensión incluida a El Vivero. Disciplina y tramo en el que también subió revoluciones Fernando Gómez, que aventajó en algo más de 4 minutos a Cartmell para iniciar el asalto al segundo puesto del cajón.

virginia, con solvencia Entre las féminas, Berasategui, con el ímpetu y la pasión por la victoria como baluartes, negó a sus adversarias cualquier atisbo de ilusión por coronarse como vencedoras desde el primer instante, desde que saltó al agua de la ría de Bilbao para dar comienzo a la prueba. Con gesto serio y concentrado, la triatleta del Ipar Kutxa Auzokoa mandó de principio a fin para repetir triunfo en la villa por delante de Maider Gaztañaga y Martina Dogana, a quienes superó en más de 8 y 14 minutos, respectivamente, en la segunda edición del Bilbao Triatlón. Una carrera que trata de hacerse un hueco de oro en el panorama nacional e internacional y que ayer sirvió como excusa para poder disfrutar, durante las casi cinco horas que duró la carrera, del complicado pero emocionante mundo de un deporte al que ayer volvieron a proteger y arropar, a pesar del desagradable tiempo, cientos de vecinos bilbainos.

Circunstancia que hizo aún más emotiva la paulatina llegada de los corredores, que agradecieron el apoyo recibido a la vez que tomaban aire después de tan exigente cita. "El tiempo ha hecho que la carrera haya sido aún más dura, pero he podido cumplir uno de mis objetivos para esta temporada, que era ganar aquí, en Bilbao", señalaba Elgezabal, el primero de todos en llegar a la meta, con un tiempo final de 4 horas, 11 minutos y 53 segundos. Un largo recorrido que selló con un sentido beso a su esposa antes de ser felicitado por los compañeros de fatigas que, paulatinamente, fueron poniendo el sello final a su participación. Después, solo las sonrisas y las celebraciones tuvieron plaza reservada en una prueba que, marcada por el esfuerzo, concluyó con fiesta vizcaina.