los emprendedores de la industria creativa ahora mismo tienen un problema porque hay una percepción generalizada de que su trabajo no se valora. Y es que hay tantos freelance y agencias ofreciendo servicios de publicidad, diseño gráfico/web y marketing desde cualquier parte del mundo, que ha derivado en una saturación de oferta low cost mediocre. ¿Por qué? Porque cuando los clientes que buscan este tipo de servicios no ven claras diferencias entre un profesional y otro, acaban eligiendo al más barato. Y esto los emprendedores lo sufren porque muchos bajan sus precios para poder competir en esta liga. Las consecuencias son claras: muchas horas de trabajo que no se ven reflejadas en su cuenta corriente. Por este motivo Laura López (lauralofer.com), marketera y creativa con un negocio de formación y consultoría on line, desarrolló su método Imperio Freelance. A través de su libro con el mismo nombre, sus charlas y sus formaciones ayuda a los emprendedores que venden servicios creativos, a encontrar su diferenciación y crear una estrategia que pone en valor su trabajo, para atraer a clientes que les respeten. El punto de partida consiste en especializarse y encontrar un nicho de mercado para destacar y tener foco con la estrategia de marketing. Y por supuesto, es importante ofrecer servicios creativos de mucho valor que de verdad tengan impacto en los clientes y que la industria creativa en general remonte gracias a que cada emprendedor sepa trasladar su valor al mundo.