RUMANÍA es uno de los muchos casos paradójicos de la Europa de Este : Desde su ingreso en la Unión Europea (UE) en el 2007, el país ha progresado económicamente y está decayendo demográficamente. El país tiene hoy un 10% menos de habitantes y en cambio su nivel económico es hoy equivalente al 64% del de la UE y en el 2007 no llegaba al 34%.

En los últimos años Rumanía fue el país comunitario de mayor crecimiento económico y su infraestructura se ha modernizado enormemente: hace quince años el 10% de su riqueza era agraria y hoy este porcentaje ha bajado al 4%. Pero?

Pero el retraso social y económico de una nación no desaparece de un día parta otro y este avance se debe en gran parte a las transferencia económicas de la UE -un total de 30.000 millones de euros desde el 2007-, a los yacimientos de gas del subsuelo, lo que le permite no tener que importarlo y las remesas de los tres millones de trabajadores que se ganan la vida en el extranjero. Y uno de los mayores problemas es que pese al retroceso de la agricultura como fuente de riqueza, el 25% del censo laboral sigue trabajando en el campo, lo que supone un fuerte freno

A todo ello hay que añadir un descenso demográfico muy fuerte -el país ha perdido dos millones de ciudadanos (casi el 10% del censo)-, lo que supone un fuerte freno al desarrollo industrial y comercial. La ironía es que un alto porcentaje de la mano de obra mejor cualificada es justamente la que ha emigrado y las empresas asentadas en Rumanía apenas encuentran los trabajadores que necesitan.

Pero el mayor problema del país es moral y no material. La corrupción que ha imperado en la Administración pública, la judicatura y la política pesa aún hoy en día como una losa sobre el país, ahuyentando las inversiones extranjeras ante la inseguridad de los capitales importados y los métodos mafiosos de las autoridades. Ahora, tras la caída del Gobierno socialista (en realidad, excomunista) y con las recientes elecciones presidenciales y las generales del mes próximo, posiblemente este grandísimo problema entre en vías de solución? aunque queda por ver lo que tardara la gente en eliminar la corrupción como elemento integrante de la vida cotidiana.