MIREN que es peculiar lapolítica vasca. En la mismajornada, el PNV hasido “el de Kanbo” por pactar con EHBildu el preámbulo del nuevo estatutoque incluye la Nación y el Derechoa decidir y “el del 155” por haber apoyadoin extremis los presupuesto delmalvado Gobierno español. ¿Bipolaridado transversalidad? ¿Principiosde quita y pon o pragmatismo amachamartillo? Servidor diría quecintura y ojo clínico para amoldarse alo que desea la opinión pública enlugar de la publicada. Porque es verdadque a los jeltzales les estáncayendo hostias como panes en lasverdulerías habituales, pero allá dondese llevan los asuntos con discreciónse piensa que este Madrid bienha valido una misa.

Por lo demás, el juez soberano noserá Llarena ni los postureros derigor, sino la ciudadanía armada deuna papeleta cuando toque. O he perdidodefinitivamente el olfato, o eldigo-Diego no le va costar ni un voto.Como mucho, los de algunos irreductiblesque serán compensados de largocon los de quienes prefieren elpájaro en mano al ciento volando.

No puedo ocultar que servidor habríapreferido un corte de mangas a Rajoyque activase el dominó correspondiente,quién sabe si para llevar aMoncloa al figurín figurón Rivera. Yaque mola tanto el cuanto peor, mejor,juguemos en serio a la ruleta rusa.Sin embargo, doy por bueno el revésque yo mismo he recibido en la convicciónde que estas cosas solo lespasan a los que están en la pomada.Desde la grada o la pancarta, no secorre el menor riesgo. Hay que sermuy miserable, oigan, para ir de dignoscon las alubias de los demásteniendo las propias aseguradas.