por fin. La ansiada fecha ha llegado y el mundo sigue. Peor, porque los enemigos de la libertad de Catalunya han sido demasiados, externos e internos. Entre ellos, el miedo, el más peligroso. A ETB, que al menos debería haber sido neutral en este conflicto entre ley y democracia, no se le ocurrió otra cosa que emitir el pasado martes Ocho apellidos catalanes, filme graciosillo que ridiculiza el independentismo hasta el escarnio. En ese contexto, la risa tendenciosa se vuelve mueca. Predominó el oportunismo sobre el buen criterio institucional. Nuestra televisión pública se busca a sí misma haciendo cambios sin innovar en profundidad, improvisando. En la tarde le ha quitado a Adela González su espacio Ahora para insertarla dentro del debate de El programa de Klaudio, una mera fusión, un pegote sin adherencia, porque no forma compañía con Landa en la presentación de la tertulia, como cuando hacía pareja con Iñaki López. ¿Y por qué no recuperar la idea de dos moderadores? No saben qué hacer con Adela, tan valiosa y extraviada. Incluso la enviaron el viernes a Barcelona como reportera de 7 días.

Menos mal que ha vuelto la cocina antes del Teleberri de la noche. ¿Cómo podía ser que la pionera en recetas televisadas no tuviese su programa gastronómico? A bocados renueva el modelo popular y añade al chef de ahora, Ander González, el contrapunto de la nutricionista, Gabriela Uriarte, plena de simpatía y sobrado conocimiento para informar sobre las propiedades y los riesgos de cada alimento. ¡Acierto! Igualmente es un acierto la novedad del miércoles, la versión euskaldun de El conquistador, bajo el peliculero título de Izan Invictus, también con Julian Iantzi al frente y todo más urbano, incluso más friki que su referente de ETB-2. Hacía falta.

Sí, es 2 de octubre. ¡Aleluya! Y a Rajoy, amo y señor de la violencia policial y judicial, dominador de la propaganda en todas las cadenas, hasta de la sectaria La Sexta, le ha faltado dar el gran golpe cerrando TV3, la televisión catalana, el último refugio de libertad. No tuvo pelotas.