Falló el asistente
eN un partido en el que no hubo problemas ni para el árbitro ni para los jugadores que, además, fue de guante blanco, solamente en lo que es el juego hubo dos jugadas discutibles. La primera se produjo en el minuto 55, cuando Aduriz reclama penalti de Aythami por posible empujón cuando el donostiarra se aprestaba a rematar de cabeza sobre la meta de Lizoain. La verdad es que el defensa canario le obstruye con veteranía dentro del área, pero no es para señalar penalti, que es lo que decidió Pérez Montero.
Sí es cierto que en el minuto 61, existe un error grave del asistente del colegiado andaluz, aunque también es evidente que es difícil acertar, porque Eneko Bóveda estaba en línea. Cuando Mikel San José recorta a su par dentro del área su centro lo recoge Bóveda, que se encontraba en línea para marcar. Gol mal anulado, pese a que sea complicado ver la posición legal del de Durango. Debió subir al marcador, lo que en caso de que así hubiera sido, se podría haber dado un resultado bien diferente al definitivo empate sin goles.
Por lo demás, hay que destacar el matiz de la deportividad y la despedida como futbolista de Valerón, que recibió un merecido homenaje en su casa y por parte de todo el mundo del fútbol. Pérez Montero solo tuvo que mostrar dos amarillas, ya en el tramo final del partido, cuando las vieron el local Momo, por protestar, y Aduriz. En definitiva, el colegiado andaluz estuvo bien en su cometido y solamente le estropeó el partido su línea, merced al comentado grave error que firmó.