Lo de Sánchez es tentar al diablo, pues ha desistido de elaborar los nuevos presupuestos  y se propone prorrogar los actuales, aunque, -dice Chus Montero- “van a hacer lo imposible para lograrlo”. Sabe que el Congreso no aceptará la locura del aumento del gasto militar, que eufemísticamente denomina “seguridad” para no espantar a la población que sabe que esos fondos se restarán de la enseñanza, sanidad o jubilaciones, a pesar de su intervención en la tele en actitud suplicante para cautivar a la opinión pública. El milagro de los panes y los peces es una metáfora buenista que no tiene credibilidad en un mundo de truhanes: OTAN, Ucrania, Gaza, Trump, la UE y la oposición del PP que lidera Feijóo, junto con Cuca, Borja y Tellado que forman el presidium de inútiles que sólo saben insultar. Ignore a VOX, pues fracasarán sin que nadie les ataque. Debería evitar nadar y guardar la ropa que le ha dado resultados, pero no se puede gobernar esperando milagros, pues va a perder el apoyo del ala progresista del Congreso haciendo piruetas en el trapecio. Aproveche las apariciones de la virgen y ponga orden en el PSOE; sea enérgico con los motines de los jueces. Además, ponga a trabajar al CGPJ. Olvide sus argucias, juegue limpio y lidere la UE, que está gobernada por la derecha montaraz europea y valore que es más poderosa, rica y organizada que EE.UU. y Rusia. Negocie con  los BRICS y países de la inteligencia del Pacífico que es donde se juega el futuro.