Mi ama ha sido casi ciega de nacimiento (se separó de mi aita cuando yo tenía tres años) y se casó en segundas nupcias con otro invidente, dándome una hermana con problemas muy serios de visión también. Me convierto en la única persona de casa que ve bien. Soy la que les cuida, ayuda, conduce el coche, utiliza todos los avances tecnológicos (cada vez más). Consigo terminar la universidad con unas notas increíbles y me ofrecen una beca para trabajar en Europa, pero mi padre fallece y mis dos aitites también (llego a litigios con parte de mi familia, porque mis tíos no quieren compartir la herencia conmigo). Mi madre y mi padrastro sufren de varias enfermedades muy graves (ictus, infartos, cánceres). Entre tanto, me han ofrecido en distintos años a través de Erasmus, másteres y doctorado, quedarme en Italia en recombinación genética, hacer el doctorado en EE.UU. y hacer el posdoctoral en EE.UU. o Reino Unido. A todo he dicho que no, por cuidar de mi familia. Yo todavía no he encontrado trabajo fijo, pero cuido de mi familia. Decido que merezco ser ama antes de los 40; no tengo pareja, nunca me he podido permitir divertirme lo suficiente como para preocuparme de ello, tengo 37 años. Pero resulta que no produzco óvulos. El poco dinero que he recopilado en el trabajo eventual que tengo, lo uso para hacer lo más bonito de mi vida: Mikel. Cinco lobitos ha ganado premios por hacer llorar. Compárenla con mi vida, entenderán por qué a mí no me hizo llorar y no me pareció para tanto.