Ha tenido que ser el Gobierno socialista quién ha dado un nuevo brío a la ley de memoria histórica para corresponder como se merecen a todas las víctimas. Mientras en España siga existiendo el bipartidismo; donde dos partidos políticos de ideología opuestas absorben la mayoría abrumadora de los votos, dejando escaso espacio para otros partidos; será muy difícil que podamos limpiar esta pseudodemocracia que adolece de mucha lagunas y restos de épocas anteriores.