Quisiera agradecer de una manera especial, el comportamiento que tuvo conmigo, hace menos de un mes, el doctor Xabier Martin Martitegui, del Departamento de Hematología, cuando fui a su consulta a mi chequeo trimestral. Le conté que estaba preocupada pues me sentía muy cansada, tenía dolor de espalda y temía la posibilidad de un cáncer. Al ver mi preocupación, me programaron un escáner para el día siguiente a las ocho de la mañana. Cuál no sería mi sorpresa, cuando al día siguiente de la prueba me llamó el mismo doctor Martin Martitegui, diciéndome que había visto mi escánner y que me quedara tranquila, pues que no tenía ningún cáncer y que si podía ir al día siguiente para recibir el tratamiento que me dan un día cada tres meses. No sé cómo explicarlo pero les aseguro que en ningún otro sitio del mundo me hubieran atendido igual. Tenemos una Seguridad Social de lujo. En toda España es buena y funciona muy bien, lo sé por experiencia, pero en el País Vasco no es que sea buena, es maravillosa. Los médicos de cabecera, las enfermeras, los que te dan la quimio, los que hacen los escáneres y todos en general, no te pueden atender y tratar mejor. En mi caso, el que el mismo doctor me llamara a casa para decirme que no tenía lo que pensaba y que me quedara tranquila, esto solamente sucede en esta tierra. Quiero terminar expresando mi más profundo agradecimiento a todos y cada uno de los que he conocido, que me han tratado en mi enfermedad.