"RAJOY ha hundido hasta límites insospechados la dignidad de la sede que ocupa”. La frase es de José Antonio Ábalos, portavoz del PSOE durante la moción de censura a Mariano Rajoy y hoy envuelto en un escándalo de presunta corrupción de una persona de su confianza. Mientras escribo estas líneas, el exministro todavía no ha dimitido de su actual cargo de diputado. El fantasma de la corrupción solo puede espantarse con el ejemplo. En el caso de Ábalos está claro que consejos vendo pero para mí no tengo. Feroz ante Rajoy, guarda ahora silencio. Nuevo golpe a la credibilidad de la política.