EL ayuntamiento de Elorrio ha documentado el trabajo que hacían las mujeres en los pozos de lino locales. Una labor no reconocida por invisibilizada que servía para la generación de textiles en la comarca y que desapareció en los años 30 cuando se industrializó la fabricación de ropa con algodón o tejidos sintéticos. En las tiendas de hoy en día, el lino vuelve a estar presente en pantalones, camisetas o camisas. El mismo tejido que antaño las mujeres de Elorrio extraían para su subsistencia es ahora un lujo para la piel. La sociedad ha necesitado un siglo de evolución para ver la valía de ambos, la del lino y la de aquellas mujeres.