MIENTRAS nos perdemos en el cruce de acusaciones entre los socios de un mismo gobierno –PSOE y Unidas Podemos– sobre el cambio de la ley del solo sí es sí; mientras abordamos el regreso (hoy) al uso del transporte público sin mascarilla casi tres años después, cuatro millones de personas dependen ya de la ayuda humanitaria para poder sobrevivir tras el terremoto de Turquía y Siria. No les abandonemos en el consumo de una información diaria voraz y veloz. Ni a ellos ni a los hombres y mujeres de Ucrania; las mujeres de Afganistan; los migrantes en la valla de Melilla. Etc, etc.