AMIGOS hasta que se demuestre lo contrario. El litigio ha llegado hasta el Tribunal Supremo, que, como Salomón, ha debido dirimir si, efectivamente, eran amigos y compartían el billete premiado en la lotería nacional. Nada menos que 125.000 euros, que se dice pronto. Y si la mitad era para cada uno. Pero el amigo que lo tenía guardado dijo desconocer casi hasta quién era aquél que aseguraba ser propietario de la mitad del décimo premiado. Todo en 2013. Justicia rápida. Lo bueno, que el demandante también cobrará intereses. Lo malo, que ya no podrán cantar aquello de “amigos para siempre...”.