L Gobierno español se ha acostumbrado a su desencuentro interno y trata de colárnoslo como algo normal. "Es normal que haya diferencias en un gobierno de coalición", dicen. Bueno, diferencias sí. Que se intenten saldar en público es otra cosa. Y cuando no son diferencias sino abismos, la cosa roza el sainete. Dramático, pero sainete. Es el caso de la guerra y todo lo que la rodea: ¿hay que hacer una cumbre de la OTAN o una cumbre por la paz? ¿Enviar armas a Ucrania o enviar pacificadores? Un Gobierno en guerra fría constante es un iceberg: la mayor parte está oculta. l