L paso atrás en la pandemia nos ha devuelto varias casillas en dirección contraria a la ansiada normalidad, precisamente por pensar que ya estábamos en ella. La vacuna no nos vuelve supermanes, pero eso ya lo sabíamos. Así que nos quedamos sin Santo Tomás y sin PIN. Otra vez. De momento, porque Olentzero y los Reyes Magos igual se tienen que quedar confinados en sus casas. Otra vez, sí. El pase covid se extiende a toda la hostelería y más ámbitos en estos días prenavideños. Las cenas de empresa se cancelan. Bienvenidos a la vieja realidad.