Puede que suene un tanto osado comparar un producto de una marca emergente china con las consolidadas firmas de alto standing y larga tradición establecidas en Alemania. Pero lo cierto es que lo que están consiguiendo los fabricantes orientales en un tiempo récord nos inclina a pensar que si aún no están a la altura de las mencionadas firmas germanas, lo van a estar muy pronto.
La mejor representación de este hecho lo ejemplifica un fabricante al que no hay que perderle la pista. Se llama Denza, es la marca premium de BYD y va a iniciar su desembarco europeo con el denominado Z9GT. Como muchos productos asiáticos, la denominación es un tanto aséptica (su nombre recuerda al de algunos teléfonos móviles), pero tras la cual se esconde una de las berlinas más sofisticadas del mundo. Un vehículo de casi 5,2 m de largo que tiene en su punto de mira a modelos como el Porsche Taycan Cross Turismo (quizá el más parecido por su concepto de berlina con portón trasero), el Mercedes Clase EQS o el BMW i7. Ahí es nada.
En palabras de la vicepresidenta ejecutiva de BYD, Stella Li, el Z9GT es “10 veces mejor que cualquier competencia y tenemos muchas características únicas que las marcas tradicionales no tienen”. Habrá que esperar a que lleguen las primeras unidades al mercado en estas últimas semanas del año para comprobar si están pecando de presuntuosos o si, de verdad, las tradicionales firmas premium alemanas deberían preocuparse… y mucho.
En relación con este primer producto de Denza (posteriormente llegarán un gran monovolumen), ya hemos dicho que se sitúa con algunos de los modelos más grandes del mercado. Aunque su diseño es atractivo y moderno, el hecho de ser una marca joven y con poca tradición puede jugar en contra de un coche cuyos rivales, precisamente, tienen una dilatada trayectoria en los mercados.
Más allá de eso, hay aspectos interesantes que destacar en su apariencia, como el gran techo panorámico de cristal que abarca más de 2,1 m2 de superficie, lo bien integrados que están elementos como los sensores de radar o de aparcamiento, las tomas de aire activas en el frontal (que se abren solo cuando es necesaria una mayor refrigeración y que el resto del tiempo permanecen cerradas para no perjudicar la aerodinámica)...
La marca asegura que la información preliminar facilitada, hasta ahora, del modelo está enfocada a las características del coche para el mercado chino. Por tanto, hay soluciones como los retrovisores digitales (que recurren a cámaras) o las puertas que se abren y cierran eléctricamente que no llegarán a los mercados europeos. Sí que lo hará el sistema que, con la ayuda de la suspensión neumática, eleva la altura de la carrocería respecto al suelo para facilitar el acceso de los pasajeros al habitáculo.
Un interior que, por cierto, es realmente impresionante por muchos aspectos. En primer lugar, porque es amplísimo y tiene un suelo completamente plano, por lo que es perfecto para viajar con comodidad. Al pasaje se le mima, con un equipamiento sofisticado. Por ejemplo, cuatro de las cinco plazas disponen de asientos con regulación eléctrica, masaje, calefacción y ventilación. El del conductor, de hecho, viene con un sistema de cojines inflables durante la circulación que tienen el objetivo de sujetar el cuerpo de quien va al volante.
No falta una gran nevera tras el reposabrazos central de las plazas traseras, capaz de enfriar a -6Cº, junto a otra guantera entre los asientos delanteros que hace lo propio y también calienta hasta los 50Cº. El Denza también tiene un completísimo sistema de iluminación ambiental con 128 colores a elegir, un equipo de sonido de Devialet con 20 altavoces (algunos de ellos móviles, como el que se eleva sobre la parte alta de la consola central) y los mejores materiales, entre ellos cuero y seda.
Eso, por no hablar de la parte multimedia, con una enorme pantalla central de 17,3”, más grande que la de los mejores ordenadores portátiles gaming, que se ve completada por otra de 13” para la instrumentación.
Lo más interesante del modelo tiene que ver con la posibilidad de elegir entre una variante 100% eléctrica (EV) y otra híbrida enchufable (DM-i). En los dos casos, ambas comparten la novedosa e3-Plattofrm, de enorme rigidez entre otras razones porque la batería (sea de mayor o menor tamaño), forma parte de la propia estructura del vehículo.
Comenzando por la versión 100% eléctrica (EV), dispone de un total de tres motores. En el eje delantero hay un propulsor que ofrece 313 CV; después, cada rueda trasera lleva otro motor de 326 CV, de tal forma que la cifra total rondaría los 965 CV. En todo caso, al igual que con ciertas especificaciones de equipamiento y tecnología, Denza asegura que las versiones en Europa podrían incluir cambios y mejoras. En todo caso, de momento, el Z9GT anuncia una velocidad máxima de 240 km/h, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 3,4 segundos; un dato extraordinario para un coche que, en la báscula, ronda las 2,8 toneladas.
En cuanto a la versión híbrida enchufable DM-i se asemeja al EV porque también tiene tres motores eléctricos, pero de menor potencia y que se complementan con un propulsor 2.0 turbo de gasolina, para ofrecer una potencia total que rondará los 900 CV. Es más ligero (2.740 kg), un poco menos rápido (0 a 100 km/h en 3,6 segundos) y con su batería de 38,5 kWh promete una autonomía en modo eléctrico de más de 200 km o bien 1.100 km en ‘modo combinado’.
¿Cómo es conducir un modelo con este tamaño, peso y potencia? Aquí de nuevo, la tecnología ‘viene al rescate’, para que los Denza parezcan coches mucho más pequeños y manejables. Sin lugar a dudas, lo que más influye en ese sentido es un sofisticadísimo dispositivo de dirección a las cuatro ruedas que permite que las traseras giren en un ángulo opuesto a las delanteras (de tal forma que en las maniobras, el coche gira en 4,62 metros, que es una cifra típica del mejor microurbano), pero que también puede hacerlas girar en la misma dirección que las delanteras. Y no lo hace solo ‘un poco’, como en otros modelos que ya ofrecen una tecnología parecida (como un Mercedes Clase S), sino hasta 15º.
Eso consigue que el Z9GT disponga de un modo ‘cangrejo’ para avanzar en diagonal. Eso por no contar que también ofrece una función para que el coche pueda pivotar sobre cada una de sus ruedas delanteras sin moverse del sitio, actuando como si fuese un compás y permitiendo aparcar o desaparcar de sitios imposibles.
Aparte de eso, la marca también anuncia que estos modelos ofrecen dispositivos como el que controla los movimientos de la carrocería (balanceo y cabeceo), además de ofrecer lo que denominan VMC o Vehicle Motion Control. Eso quiere decir que el Denza ajusta constantemente (de hecho, cada 10 milisegundos) el funcionamiento de elementos como la frenada, la suspensión, la dirección…
¿Y eso qué significa? Que es un vehículo que está permanentemente alerta durante la conducción, hasta tal punto que sus responsables aseguran que si se produjese el reventón de un neumático mientras se circula a 180 km/h, el VMC se encargaría de controlar la estabilidad, ajustar la potencia de cada uno de los motores y, en definitiva, mantener ‘la compostura’ en una de las situaciones más difíciles que se pueden afrontar durante la marcha.
Cuando se aproxime la fecha de llegada del modelo se conocerán los detalles y especificaciones definitivas, así como los precios. En su país de origen, un coche de este nivel cuesta claramente por debajo de los 50.000 euros, mientras que en Europa podría valer entre 70 y 85.000 euros, que sería cerca de la mitad de sus posibles rivales.