EL Sportage es el modelo más laureado de Kia. Y no hay mejor reconocimiento social que el que concede el público cuando decide pasar por caja y formalizar un pedido. La última generación del SUV acumula seis mil matriculaciones desde enero hasta abril, un 40% más que en 2022, año de su renovación. La nueva remesa del modelo contribuye decisivamente a la consolidación entre las mejores marcas de Kia, cuarta del mercado en lo que va de ejercicio. Si mantiene el ritmo, cerrará 2023 con más de sesenta mil unidades entregadas; el 61% de esa clientela, en la que dos de cada tres son particulares, se decanta por versiones parcial o totalmente electrificadas.

Este tipo de vehículos afronta la transición tecnológica buscando la movilidad sostenible. En ese ámbito, la evolución de Kia refleja y amplifica la de la propia automoción. La demanda de vehículos con apoyo o impulsión eléctrica crece de manera constante. Los datos del mercado en los últimos diez años son elocuentes. En 2014, la electrificación era residual y no alcanzaba el 2% de unas matriculaciones dominadas por los vehículos diésel (68%) y gasolina (30%). Esa hegemonía fue decayendo paulatinamente, a la vez que crecía la presencia de modelos electrificados.

Para 2020 los híbridos, con cable y sin él, ya representaban respectivamente el 3% y el 9% de la demanda, en tanto que las motorizaciones a pilas aportaban otro 2%; el gasóleo contaba con un 28% de partidarios, muchos de los cuales se habían pasado a la gasolina (49%). El panorama continúa en plena evolución. En lo que va de año, los eléctricos puros representan el 4% de las matriculaciones, los híbridos enchufables el 6% y los HEV el 14%.

En 2023, los diésel antaño hegemónicos, pesan en el mercado lo mismo que los híbridos no enchufables (14%). Los modelos de combustión a gasolina captan el 42% de la demanda en el primer cuatrimestre. Ese porcentaje supera el 60% si se computan como tales los vehículos animados por sistemas MHEV de hibridación ligera, casi siempre sostenidos por bloques de gasolina.

Metiendo en el mismo saco todas las modalidades de electrificación, sus ventas suponen el 41% de las matriculaciones en el mercado español. Kia supera con holgura ese porcentaje al computar una participación del 61%, que la convierte en la segunda marca más electrificada del mercado. Lo consigue desplegando desde hace tiempo una amplia y heterogénea oferta de modelos provistos de estas tecnologías más o menos limpias.

La firma surcoreana lleva proponiendo candidatos así desde 2012, momento en el que pisó la calle el Optima HEV. Tras este híbrido inicial se fueron sucediendo creaciones como el Soul EV, su pionero 100% eléctrico, y la versión enchufable PHEV del Optima. Pero fue el lanzamiento del Niro, lo que permitió a Kia marcar un hito en el ámbito de la ecomovilidad. Su estreno lo convirtió en el primer fabricante en apostar exclusivamente por motorizaciones electrificadas. El rumbo se mantiene hoy para deparar automóviles decididamente innovadores como el eléctrico EV6. La siguiente incorporación al catálogo será el EV9, ambicioso SUV de gran talla también a batería que verá la luz en breve.

A la espera de su llegada, prevista tras el verano, el elenco actual de Kia plantea dieciocho referencias electrificadas. Las hay para todos los gustos, necesidades y bolsillos. El abanico se abre por las variantes MHEV, consideradas mild hybrid por la ligera contribución de sus sistema de hibridación a 48 voltios. Recupera y devuelve energía en forma de apoyo puntual del motor térmico que anima al vehículo, contribuyendo así a reducir el consumo y las emanaciones de CO2. Recurren a esta modalidad el Rio, el Stonic, el Ceed, el Ceed SW, el ProCeed, el XCeed y el Sportage. Hay un Kia con hibridación suave desde 18.048 euros en adelante.

El siguiente capítulo plantea hibridación clásica HEV, en la que motor térmico, bloque eléctrico y batería trabajan coordinadamente para impulsar el vehículo y generar energía para autoabastecerse parcialmente. Kia ofrece aplicaciones de este sistema, con distinto rendimiento, en el Sportage, el Niro y el Sorento, con precios promocionados desde 28.296 euros.

Un escalón por encima en el escalafón de la sostenibilidad se encuentra la modalidad PHEV. Esta hibridación enchufable propicia una mayor contención de las emisiones, al contar con más apoyo eléctrico: permite rodar unos pocos kilómetros solo con la energía de su batería, sin expeler dióxido de carbono. La ofertan los tres mismos modelos disponibles con sistema HEV, así como el XCeed y el ProCeed SW. Hacerse con el híbrido enchufable más asequible requiere desembolsar al menos 34.769 euros.

Kia plantea tres candidatos a quienes buscan un BEV, siglas inglesas (Battery Electric Vehicle) que identifican a los automóviles exclusivamente a pilas. El singular y minoritario Soul queda eclipsado por un Niro muy asentado en la categoría de los SUV compactos. Por encima de ambos modelos asoma el EV6, producto mestizo de crossover y berlina de talla media, que está disponible en una amplia horquilla de potencias (desde 170 a 585 CV) y autonomía (hasta 528 km). Kia reclama 38.890 euros por su eléctrico menos costoso.