El propietario de la finca de Arbaizenea de Donostia, Cayetano de Alba, ha propuesto al Ayuntamiento abrir el espacio ubicado en pleno corazón de Aiete, a distintos usos que puedan interesar a la ciudad.
El hijo de la duquesa de Alba, fallecida hace diez años, mantuvo ayer un encuentro con el alcalde, Eneko Goia, y la concejala de Urbanismo, Nekane Arzallus, con el fin de exponer su propuesta y explorar las opciones de su propiedad para distintos usos y servicios que podría proporcionar a la ciudad.
Fuentes de Alcaldía confirmaron a Noticias de Gipuzkoa que la propuesta ha sido bien acogida por los responsables municipales y que el Ayuntamiento analizará la iniciativa de la Casa de Alba, que podría suponer que la verja de acceso que siempre está cerrada pueda abrirse al público, al menos en determinados momentos.
Pequeños congresos, reuniones protocolarias, almuerzos con personalidades o invitados y actividades ciudadanas organizadas por el propio Ayuntamiento podrían ser algunos de los eventos que podría acoger el espacio de Arbaizenea, un terreno de dos hectáreas con cuidados jardines y un palacete.
El edificio fue edificado en 1881 por el abuelo del primer marido de Cayetana de Alba en estilo cottage, el mismo que el palacio de Miramar. En el lugar existía un caserío junto a un bosque de robles. En los últimos años, el edificio y la finca se han utilizado para bodas privadas y acontecimiento de la alta sociedad.
